Compuesta actualmente por un equipo de 7 profesionales veterinarios y estudiantes avanzados, brinda atención médica 24 horas a todos los animales, de toda raza y especie, que participan de la tradicional exposición ganadera. Juan Charaf y Emillio Sequi nos cuentan acerca de esta tarea, que es tanto una oportunidad como un desafío, por la responsabilidad que implica.
La Guardia Veterinaria de la Exposición Rural de Palermo es un servicio que brinda Laboratorio Biogénesis Bagó desde hace más de 30 años en la tradicional fiesta del campo argentino. Compuesta actualmente por 7 médicos veterinarios y estudiantes avanzados con especialidades complementarias, se presta atención profesional a los cabañeros de todas las razas y especies que participan de la expo, las 24 horas y durante todos los días que dura el evento.
ZonaCampo entrevistó a los MV Juan Charaf y Emilio Sequi, que nos contaron acerca de la historia de la Guardia y la oportunidad de aprendizaje profesional que el intercambio y las situaciones diarias ofrecen, que van desde cosas simples de casuística habitual, a casos raros y extraordinarios.
“Somos veterinarios privados, trabajamos en nuestras ciudades y una vez al año nos reunimos acá para atender los animales de la exposición en una guardia de 24 horas, durante los días que tiene lugar la expo. Si bien hay especialidades dentro del equipo, todos trabajamos en conjunto para poder hacer frente a esto”, explicó Juan Charaf.
El equipo también suele encontrarse en otras ocasiones para llevar a cabo, algunos meses antes de la Expo, capacitaciones específicas en temáticas habituales o extraordinarias. “Es importante destacar el rol de Juan Cruz Muriel, veterinario y gerente de Biogénesis, que recibe y coordina todas nuestras demandas de capacitación. A veces se trata de cosas técnicas, específicas, como neonatología, casos clínicos extremos que en la diaria no vemos, y últimamente hemos recibido capacitaciones que estuvieron buenas en habilidades blandas, como comunicación tanto dentro del equipo como con los cabañeros, por ejemplo”, agregó Emilio Sequi.
Durante los días en que se desarrolla la Expo, pasa de todo y el equipo siempre cuenta con integrantes disponibles, las 24 hs. Naturalmente, cada Expo tiene “su caso”, o podría decirse, “EL CASO” que queda en el anecdotario de la guardia. En el caso de la 2025, quedará en la memoria la reanimación de Emilia, una ternerita Brangus que nació casi sin vida a mitad de la noche.
Hija de la hembra que resultara Reservada Gran Campeona de la raza, de cabaña Los Guasunchos, Emilia nación prácticamente sin signos vitales pero fue reanimada gracias a los esfuerzos de todo el equipo que estaba de guardia en este momento. En agradecimiento, la gente de la cabaña la bautizó con ese nombre, en referencia a Emilio Sequi, quien estuvo a cargo de la provisión de oxígeno durante la reanimación.
“Nos tocó a mitad de la noche, Juan y yo estábamos de guardia y nos llamaron para atender un parto. La situación estaba complicada y la verdad que gracias a toda la capacitación que recibimos de parte de Hernán Moscuzza que creo que vale la pena mencionarlo, con su consejo estábamos súper listos, hicimos terapia con oxígeno y la ternera salió adelante. Estaba en una situación crítica, salió adelante y la verdad que nos puso muy contentos haber logrado mantenerla con vida y que hoy esté con nosotros acá en la exposición”, detalló Sequi.
Respecto de lo que representa para un médico veterinario ser parte de la guardia de la rural, Charaf expresó que “La Rural tiene toda una mística, desde la parte de edilicia, los animales… la historia que ha pasado por acá. Estamos en una pista, probablemente una de las pistas más importantes del mundo, con animales que realmente son importantes y son padres de raza, y de pronto el desafío que nos toca a nosotros que es velar por la salud en un contexto particular como es este, en conjunto con los cabañeros, con los organizadores de la rural que todos nos proponemos en cada uno de los días que dura la expo que los animales estén bien”.
“Significa muchísimo, es un desafío, es una gran responsabilidad y el hecho de que cada uno de los miembros del equipo esté tan sólido en el trabajo que tiene que hacer y poniendo lo mejor de cada uno a pesar de que es una exposición larga, de que son un montón de horas, de días y algunos casos que realmente son desafiantes”, agregó.
“Para mí es un orgullo, un honor de pertenecer a la guardia y un agradecimiento grande a los que fueron mis formadores y a los que me permitieron estar adentro de la guardia. Pero también es un gran honor poder compartir esta nueva guardia, esta nueva etapa porque pos pandemia, hace cuatro años hubo una renovación y los chicos que ingresaron, ingresaron con una energía y una vocación de servicio impresionante”, concluyó.
