El Ing. Agr. Darío Colombatto, docente de la FAUBA y asesor privado, explicó durante las Jornadas Ganaderas de Pergamino que el autoconsumo puede alcanzar los mismos resultados que el suministro diario, siempre que se lo gestione con método, medición y prolijidad. La clave, asegura, es “hacerlo profesionalmente”.

En momentos donde la eficiencia define la rentabilidad ganadera, el sistema de autoconsumo vuelve a ganar espacio, especialmente entre los productores medianos y pequeños que buscan reducir costos sin perder desempeño. En el marco de las Jornadas Ganaderas de Pergamino, el Ing. Agr. Darío Colombatto —profesor de la FAUBA y asesor reconocido en nutrición animal— compartió pautas concretas para transformar esta práctica en una herramienta profesional.
Según explicó en declaraciones reproducidas por Valor Carne, “haciendo las cosas bien, en escalas pequeñas y con poco personal se puede lograr la misma ganancia de peso que con el suministro diario”.
El autoconsumo nació como una solución práctica para campos con poca mano de obra y equipamiento limitado. Pero, advierte Colombatto, no se trata simplemente de dejar el alimento y esperar resultados. “Hay que manejarlo profesionalmente y medir las mismas variables que en un suministro diario”, sostuvo, remarcando que la sobresimplificación es el principal riesgo del sistema.
Organización y límites
Para un buen manejo, el técnico recomienda no superar las 60 vacas o 100 novillitos por boca abierta y trabajar con vacas secas cuando sea posible. También sugiere mantener un frente de avance de 40 centímetros diarios para asegurar material fresco y evitar oxidaciones.
“El encargado debe revisar dos veces por día el silo, bajando la parte superior con prolijidad. Si el animal pisa el alimento, ya no lo come. La vaca no es zonza”, graficó Colombatto.
Prevención de barro y acidosis
El barro es uno de los grandes enemigos del sistema. Para minimizarlo, el especialista aconseja ubicar los silos en pendiente, abrir del lado más bajo y orientar la boca al norte, evitando humedad y hongos.
Además, propuso armar dos medias bolsas en lugar de una, para contar con una de respaldo en caso de lluvia o complicaciones de acceso.
En cuanto al riesgo de acidosis, señaló que suele aparecer por errores de adaptación. “No podemos pasar de un día para otro del suministro diario al autoconsumo: hay que hacerlo de forma progresiva, usando dietas de transición o rollos como amortiguadores”, explicó.
Medir para mejorar
El otro pilar es el control. “Hay que pesar los animales al ingreso y al final, calcular la ganancia diaria y estimar la conversión. No puede ser que en 2025 todavía discutamos si tener o no una balanza en el campo”, ironizó el docente.
El registro constante del consumo, el avance del silo y la performance del lote permiten ajustar decisiones y detectar ineficiencias a tiempo.
Escalas chicas, resultados grandes
Un estudio del INTA Balcarce citado por Colombatto demostró que el autoconsumo bien manejado puede igualar las ganancias de peso del suministro diario, con la ventaja de simplificar el trabajo.
“El autoconsumo no busca superar otros sistemas, pero sí permite que las escalas chicas logren resultados productivos muy similares”, concluyó.
Fuente: Valor Carne – Nota de la Ing. Agr. Liliana Rosenstein.
Adaptación editorial: ZonaCampo



