La ministra de Seguridad visitó 9 de Julio junto al secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, para coordinar medidas con intendentes, productores y la Mesa de Enlace. El Gobierno anunció maquinaria, asistencia por 1900 millones de pesos y la continuidad de la obra sobre el río Salado.
La emergencia hídrica que afecta a buena parte del centro y oeste de la provincia de Buenos Aires tuvo este fin de semana la visita de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y del secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, quienes recorrieron zonas anegadas y mantuvieron reuniones con productores, fuerzas federales y autoridades locales en el distrito de 9 de Julio.
El encuentro, que reunió a más de 400 productores y representantes de la Mesa de Enlace, se desarrolló en la Municipalidad y en la Sociedad Rural local. Allí, Bullrich supervisó los operativos de asistencia y anunció una batería de medidas para mitigar el impacto de las inundaciones que mantienen aislados campos, caminos y localidades rurales.
“Esta situación es tristísima —expresó la ministra—. Venimos con maquinaria, asistencia económica y una planificación a corto, mediano y largo plazo. No queremos personas, caminos ni pueblos aislados”.
Asistencia inmediata y alivio financiero
Bullrich confirmó el envío de maquinaria del Ejército Argentino, Vialidad Nacional y la Agencia Federal de Emergencia, además de una asistencia económica de 1900 millones de pesos que será distribuida entre los municipios más afectados “según el nivel de anegación del agua”.
Asimismo, anunció la apertura de créditos especiales a sola firma a través del Banco Nación, junto con la postergación de vencimientos entre noviembre y diciembre para productores rurales alcanzados por la emergencia.
“Se abre una línea de financiamiento blando para que el productor pueda sostener la actividad mientras se recupera el campo”, agregó.
Obras estructurales: el avance en la Cuenca del Salado
Entre los anuncios, la funcionaria destacó el avance de la etapa 4 del Plan Maestro de la Cuenca del Salado, una obra clave para el drenaje del centro bonaerense. “El Gobierno nacional inició esta etapa en septiembre y esperamos finalizarla en un año. Luego le corresponde continuar a la provincia”, explicó Bullrich.El proyecto busca canalizar el agua y reducir el impacto de futuras inundaciones sobre millones de hectáreas productivas. Según los últimos relevamientos, más de cinco millones de hectáreas están afectadas actualmente por el exceso hídrico en Buenos Aires.
La respuesta del campo
Durante la jornada, los presidentes de las entidades de la Mesa de Enlace —Nicolás Pino (SRA), Carlos Castagnani (CRA), Lucas Magnano (Coninagro) y Andrea Sarnari (FAA)— plantearon la necesidad de sostener el acompañamiento al productor y acelerar las obras de infraestructura largamente reclamadas.
“No hay una solución inmediata, pero lo importante es atender las zonas más complicadas y evitar que los productores queden aislados”, señaló Pino.
La conformación de un comité de emergencia, integrado por la Nación, la Provincia y los municipios, buscará ahora coordinar los esfuerzos y canalizar los reclamos del sector en una agenda común que combine asistencia inmediata y planificación estructural.
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