El Ing. Agr. Diego Oliva, director académico de la Diplomatura Internacional en Pulverización Agrícola, nos cuenta acerca del proyecto que comienza el 1ro. de abril y que cuenta con el aval de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y la Universidad de la Empresa de Uruguay.  

La correcta aplicación de fitosanitarios es un tema sensible en muchos aspectos, que van desde el impacto productivo y económico de la empresa agrícola, la salud de los operarios y personas involucradas, el cuidado del ambiente y la creciente demanda social al respecto. En este sentido, cobra gran relevancia la capacitación de los operadores y la correcta calibración de los equipos para asegurarlo.

Buscando responder a la demanda de este tipo de formación detectada en personas que ya estaban trabajando y querían profundizar, hace algunos años surgió un programa de buenas prácticas agrícolas para operadores de equipos terrestres y aéreos que en 2023 incorporó más contenidos y tecnologías, evolucionando a la Diplomatura Internacional en Pulverización Agrícola cuyo primer módulo comienza el primero de abril.

"Había una demanda insatisfecha por parte de operadores de equipos, por lo cual empecé la búsqueda de contenidos y de especialistas de cada una de las materias o rubros que era necesario abordar. Empezamos trabajando con la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y fuimos aprendiendo mucho en el transcurso de las ediciones", explicó a ZonaCampo el Ingeniero Agrónomo Diego Oliva, docente y director académico de la diplomatura.

El programa cuenta con una serie de 10 módulos totalmente on line con los cuales se van adquiriendo créditos que permiten acceder a la obtención del diploma. Las clases son 100% asincrónicas, es decir, los contenidos están disponibles las 24hs para poder verlos las veces que se desee y hay un foro de consultas donde pueden evacuarse todas las dudas, con un alto nivel de respuesta por parte del equipo de docentes y especialistas.

"El año pasado hicimos un convenio con la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de la Empresa de Uruguay, ya que ellos tenían la misma problemática. De hecho, es una problemática transversal a la actividad en diferentes lugares del mundo. Pasa lo mismo en Brasil, en Uruguay, en Paraguay, en Sudamérica, por lo menos. Entonces, ambas universidades acordaron ser entidades certificantes de estos contenidos aportando cada una parte de su claustro académico", agregó.

La actividad de agroaplicación cuenta, en líneas generales, con un alto porcentaje de operadores con mucho conocimiento práctico, pero muy poca o nula formación técnica o teórica, lo cual los limita en su desempeño con todos los riesgos y problemas que ello puede llegar a acarrear.

"El objetivo de esta diplomatura es proveer esos conocimientos, capacitarlos en el manejo de otras variables y que puedan tomar decisiones en diferentes sitios o en condiciones de aplicación. La aplicación de fitosanitarios es una actividad muy sensible, son productos químicos que se liberan al ambiente y que las manipula una persona. Entonces, se necesita de un nivel de conocimiento y de prevención de riesgos muy alto", apuntó Oliva. 

Según nos contó el director académico, este programa evoluciona del anterior no solo por las tecnologías que incorpora como sistemas de pulverización de frutales y pulverización con drones, quedando así contemplados todos los sistemas de aplicación que hay en el mundo hasta ahora, sino por la amplitud de las temáticas a cuestiones de química, manejo del ambiente, temas biológicos y salud humana.

En cuanto al formato 100% online y asincrónico, Diego Oliva remarcó que fue elegido en función del perfil de las personas a quienes se dirige la propuesta: operarios de máquinas que ya están trabajando, con altos niveles de conocimiento práctico y con disponibilidad limitada de horarios para capacitarse de manera presencial.

"Es para gente que ya está en la actividad, que en algún momento de su mes puede disponer de 10 horas, tal vez no todas juntas, sino en forma programada, para tomar un módulo, un crédito. Es un sistema americano diseñado en créditos, sumatoria de créditos, así que pueden hacer cursos individuales. Cuando llega a la totalidad de los créditos se diploma, accede al certificado global, doblemente certificado. Se pensó de esa manera porque hacerlo en forma asincrónica y a distancia era lo más simple y posible para que el estudiante pueda hacerlo", aseguró.

"El programa abarca cuatro ejes principales. El eje de aspectos biológicos apunta a identificar el problema dentro de un cultivo, una maleza, una plaga, una enfermedad, saber en qué estado están. Principalmente para abordar lo que se llama ventana de aplicación, que se llegue en el momento adecuado", explicó Oliva.

"Otro de los focos, muy preciso y desarrollado, es la química, el manejo de la química. La aplicación de fitosanitarios es muy compleja en términos químicos porque se usan muchos productos en el mismo tanque. Entonces se necesita tener algunos conocimientos bastante desarrollados. Contamos con el especialista químico Hugo March, diseñador y formulador de moléculas para fitosanitarios y reconocido por ser quien más patentes de este tipo tiene en Argentina. March trabaja en el ámbito privado para las empresas más importantes del sector y es uno de los docentes destacados de esta diplomatura", agregó.

El tercero de los ejes es el de calibración de equipos. "Cada uno de los equipos que distribuyen estos caldos químicos está abordado por un especialista. Hay un especialista en equipos terrestres, uno en equipos de frutales o hidroneumáticos, uno en equipos terrestres selectivos, otro en equipos aéreos y otro en equipos de drones. También está todo el abordaje de la buena práctica agrícola, que son los niveles de prevención y riesgo, con dos especialistas de una larga trayectoria, el ingeniero Fernando Langoni y el ingeniero Guillermo Delgado".

El programa se completa con un eje sobre climatología, dictado por la reconocida climatóloga Dra. Stella Carballo, que es del INTA, que es la referente argentina en esto y formadora de formadores también. Y una especialista en certificación que es la ingeniera Queheille de Uruguay, que trabaja para un ente certificador internacional que se llama LSQA"

Como cierre, Oliva destacó el valor de la diplomatura a los fines de realizar trabajo de aplicación tanto para el productor, como para el contratista, el cuidado ambiente y para la demanda social al respecto.  "Pensar que todavía se puede producir sin la asistencia o sin la tecnología necesaria en aspectos de control químico, es una quimera. Es algo imposible. Es un largo debate, pero hay que hacerlo bien. Se habla a veces de agrotóxicos, pero es como suponer que los medicamentos humanos también pueden ser tóxicos si se los utiliza mal o sin prescripción. El caso más claro fue este año, que si los cultivos no se hubiesen tratado, se perdían. En el norte de la provincia de Buenos Aires se descuidó el control de una chicharrita que se llama Spiroplasma, porque se pensó que era un problema del norte, y se van a perder miles y miles de hectáreas de maíz. Esto es una realidad. Entonces el tratamiento es necesario, pero es fundamental hacerlo bien y eso acerca la actividad al cuidado de la salud, del ambiente y a la demanda de la sociedad", concluyó.

Diplomatura Internacional en Pulverización Agrícola

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Instagram: @diplo.pulverizacion

Link para inscribirse https://www.aldeaeducativa.ag/educacion/diplomatura_internacional_en_tecnologias_de_pulverizacion_agricola