El Gobierno Nacional derogó 28 normas que regían la cadena ganadera buscando simplificar controles y desregular el mercado
La medida, oficializada a través de la Resolución 119/2025, alcanza a disposiciones dictadas por la Junta Nacional de Carnes y la ex ONCCA, algunas con más de medio siglo de vigencia. El objetivo, según el Ejecutivo, es eliminar regulaciones obsoletas y reducir la carga burocrática sobre el sector.
En una nueva acción orientada a la desregulación de la economía, el Gobierno nacional, a través de la Secretaría de Bioeconomía, resolvió eliminar 28 normas históricas que regían distintos aspectos de la cadena ganadera. La decisión fue publicada en el Boletín Oficial mediante la Resolución 119/2025 y forma parte del proceso de revisión normativa que impulsa la actual gestión para «modernizar» los marcos legales que afectan la actividad agroindustrial.
La mayoría de las normas derogadas habían sido dictadas por organismos hoy desaparecidos, como la Junta Nacional de Carnes (JNC) y la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA). Algunas de ellas estaban vigentes desde fines de la década del ’60, mientras que otras correspondían al período 2004–2011, cuando la ONCCA tenía un rol central en la intervención del comercio agroalimentario.
Según argumentaron desde la Secretaría, estas disposiciones «carecían de aplicación práctica», no eran fiscalizadas por el Estado y, en muchos casos, generaban superposiciones con sistemas modernos de gestión y control ya vigentes, como el SIGICA, el RENSPA, el DTe y el RUCA.
Qué regulaban las normas derogadas
Del total de 28 normas eliminadas, 20 corresponden a resoluciones dictadas por la extinta Junta Nacional de Carnes entre 1967 y 1991. Las otras 8 fueron dictadas por la ONCCA entre 2004 y 2011.
Entre los aspectos que regulaban se encuentran: Los procedimientos de remates y la actuación de los martilleros ganaderos, las condiciones de uso de corrales y faena compartida en frigoríficos, la exigencia de romaneos oficiales, documentos que debían detallar peso, destino y clasificación de los animales en faena. El registro y autorización de plantas de faena, operadores comerciales y consignatarios. Requisitos vinculados a la faena por cuenta propia, especialmente en el segmento porcino.
El Gobierno consideró que muchas de estas normativas respondían a un esquema de tutela estatal sobre el mercado que hoy no se justifica, y que su permanencia representaba una carga administrativa innecesaria.
El argumento oficial
En los fundamentos de la resolución, la Secretaría de Bioeconomía sostuvo que «la simplificación y la eliminación de regulaciones innecesarias es un paso indispensable para mejorar la competitividad del sector productivo». Afirmaron también que las normas ahora derogadas «ya no reflejan la realidad de la actividad ganadera, ni están alineadas con los sistemas de gestión actuales».
La decisión se enmarca en una serie de medidas orientadas a reducir la intervención estatal en las cadenas agroalimentarias, con el foco puesto en liberar al sector de lo que el Gobierno considera «trabas históricas».
Repercusiones y desafíos
La derogación fue bien recibida por entidades vinculadas a la comercialización de hacienda y por algunos sectores de la industria frigorífica, que ven en la medida una señal clara de desburocratización.
Sin embargo, también surgieron advertencias desde ámbitos técnicos y sanitarios. Especialistas en trazabilidad y calidad expresaron preocupación por la posible pérdida de herramientas de control y fiscalización, especialmente si no se implementan medidas complementarias que garanticen la transparencia en la faena y el comercio de carne.
Una medida en línea con la estrategia del gobierno
Desde su asunción, el presidente Javier Milei impulsa una agenda de reforma profunda del Estado que incluye la revisión de marcos regulatorios en todas las áreas de la economía. Esta eliminación de 28 normas ganaderas se suma a otras acciones similares que ya se llevaron adelante en rubros como la pesca, la agricultura y el transporte de productos agropecuarios.
El enfoque oficial apunta a reducir la carga regulatoria, alentar inversiones y simplificar la operatoria del sector privado. La eficacia de estas medidas, sin embargo, dependerá en gran parte de su implementación práctica y del equilibrio entre libertad de mercado y control sanitario y comercial.
Las 28 medidas derogadas de la cadena ganadera
A. Normas de la Junta Nacional de Carnes (20 resoluciones, entre 1967 y 1991)
Estas normas respondían a una lógica de fuerte intervención estatal en la cadena cárnica. Muchas estaban en desuso, pero seguían vigentes formalmente.
Res. 88/1967 – Registro de criadores e invernadores.
Res. 378/1972 – Normas contables y registros para abastecedores de hacienda.
Res. 132/1974 – Regulación del comercio y distribución de carnes.
Res. 3005/1977 – Requisitos para martilleros y remates públicos.
Res. 492/1978 – Clasificación obligatoria en faena.
Res. 1114/1978 – Uso y condiciones de corrales en plantas frigoríficas.
Res. 438/1981 – Control de calidad en productos cárnicos.
Res. 151/1983 – Obligación de romaneo oficial de faena.
Res. 153/1983 – Complementa la anterior: romaneo y registro oficial.
Res. 490/1986 – Disposiciones administrativas sobre permisos de faena.
Res. 253/1988 – Requisitos para operadores y consignatarios.
Res. 142/1989 – Establece procedimientos para habilitaciones.
Res. 120/1990 – Normas sobre almacenamiento y empaque de carnes.
Res. 121/1990 – Uso obligatorio de romaneos y reportes.
Res. 159/1990 – (Alcance menor) Patrones de calidad de productos secundarios.
Res. 238/1990 – Normas de venta para carne y subproductos.
Res. 458/1990 – Modificación de registros para operadores.
Res. 68/1991 – Procedimientos administrativos varios.
Res. 312/1991 – Obligaciones de documentación en plantas.
Res. 317/1991 – Instrucciones complementarias sobre comercialización.
B. Normas de la ONCCA (8 disposiciones, entre 2004 y 2011)
Enfocadas en controles comerciales, registros y trazabilidad durante un período de fuerte intervención oficial en mercados agroalimentarios.
Disp. 3281/2004 – Procedimiento para operadores de carne vacuna.
Disp. 2187/2005 – Registro obligatorio de establecimientos faenadores.
Disp. 2287/2005 – Faena por cuenta propia de porcinos.
Res. 2158/2006 – Procedimientos administrativos internos.
Res. 25/2008 – Modificación del sistema de control de stock cárnico.
Res. 4906/2010 – Trazabilidad obligatoria en operadores registrados.
Res. 1410/2011 – Declaración jurada para faena bovina en establecimientos.



