Por josé Gamondi on Viernes, 06 Abril 2018
Categoría: Ganadería

"Será un semestre complicado para la ganadería"

El Asesor Ignacio Iriarte afirma que recién para septiembre-octubre los criadores podrían esperar una recuperación de los precios de la invernada

Serán meses de alta oferta de ganado, tanto de gordo como de invernada. En la Argentina todavía el 70 por ciento de los kilos producidos anualmente por la ganadería se deben al pasto, y el pasto se ha acabado después de la seca en el 70-75 por ciento de los campos ganaderos.


Se espera un semestre muy difícil (abril-septiembre), con pocas reservas y poco pasto diferido. Es probable que por unos meses crezca la faena (5-10 por ciento), que bajen los precios reales del gordo y de la invernada, y que durante ese período crítico, suban al mismo tiempo el consumo y la exportación.


Si el invierno es benigno, estos efectos se moderarán, pero si el invierno es frío y seco, dado el punto de partida con que se encara, los efectos negativos pueden agravarse. Cuanto más duro sea el invierno, mayor será el rebote –en la baja de oferta y en la suba de precios– al que asistiremos luego. Los criadores podrían esperar ya para septiembre-octubre una recuperación en los precios de la invernada, mientras que el gordo deberá esperar unos meses más, hasta que termine de salir de los feedlots toda la hacienda que se encerrará inexorablemente en los próximos meses.


Oferta forrajera

En el corto plazo, se pastorean maíces, sorgos, sojas y hasta girasoles, se adelanta la comida de los silajes, y se consumen rollos, cuyo uso estaba previsto para mucho más adelante. Se trata de aprovechar los cultivos fallidos, y de ir ganando kilos para poder vender los animales lo antes posible con el peso mínimo de faena. Muchos de los que hacen novillo pesado ven que en los próximos meses venderán más liviano que lo acostumbrado.
En el corto plazo, los criadores adelantan los tactos y apuran la vacunación para sacar los destetes que, más livianos que hace un año, todavía están en buen estado. El ternero macho cotiza hoy un 10 por ciento por debajo de enero. Los terneros que se venden con plazo –lo que busca el comprador en tan difícil situación– se negocian a precios razonables, ayudando también la calidad genética del lote para sostener los valores que, expresados a moneda constante, están hoy 17 por ciento por debajo del promedio histórico (2005-2017).

Terneras, discriminadas

Las terneras, sobre todo si son muy livianas, son discriminadas, porque para el feedlot están muy lejos del peso mínimo de faena. Se vende proporcionalmente mejor la invernada pesada. Muy difícil la comercialización de vientres, donde para vender hay que aceptar plazos generosos y precios bien por debajo de los que se lograban hace unos meses, aunque cabe observar que el mercado para vacas y vaquillonas preñadas, con el fin de la fase de retención ya venía pesado desde hace tiempo.
Es razonable esperar que tengamos en los próximos dos-tres meses una altísima oferta de invernada; este año serán contados los criadores que podrán retener el destete para vender escalonado, o para recriar, o para sacar un ternero más pesado fuera de estación.
Se estima que por la reducida superficie que se ha podido implantar con verdeos, y por lo muy pelados que están hoy los campos, serán pocos los productores que podrán este invierno hacer recría.
El criador está vendiendo o va a vender una proporción muy alta de su destete, y muchos que tienen terneros y maíz, prefieren vender la invernada –que por varios meses están viendo floja– y guardarse el maíz, cuyo precio creen que puede seguir escalando el próximo invierno. Feedloteros, criadores de pollos y de cerdos están viendo con mucha preocupación la disponibilidad de maíz el próximo invierno. 

Agrovoz
Foto: Campo Total

Dejar comentarios