Un informe de CREA indica que la sequía empujó los precios hacia abajo pero significa una restricción de oferta para el próximo año
La Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA) estimó que el precio del novillo en pie podría caer entre 10 y 16 por ciento, en términos reales, este año, producto de que la cotización avanzará mucho menos que la inflación, a raíz de un exceso de oferta provocado por la sequía.
Sin embargo, los ganaderos podrían tener revancha a partir de 2019: según CREA, esta mayor oferta de carne actual significará una restricción a futuro, que hará que los precios superen a la suba del costo de vida.
Más faena
La Asociación que nuclea a los Grupos CREA que funcionan en todo el país emitió un comunicado en el que dio su visión sobre cómo la peor sequía en 50 años tuvo un fuerte impacto en la actividad ganadera.
Para CREA, la reducción de la disponibilidad de pastos y forrajes por falta de agua ha provocado que los campos necesiten disminuir la carga y, a la vez, al incluir más grano en la dieta, se aceleran los tiempos de producción y se mandan más animales a faena.De esa manera, de una proyección inicial de producción de carne bovina de 2,8 millones de toneladas res con hueso para 2018, se pasó ahora a una estimación de tres millones de toneladas.
Machos
Según CREA, "la sequía está incrementado la tasa de extracción de novillos; es decir, la cantidad de cabezas que se faenan sobre el stock. Desde 2003 a la actualidad, por diversos factores, la mencionada tasa pasó de 70 a 104 por ciento; es decir, en 2017 se faenaron mayor cantidad de terneros que los destetados".
Así, si esta tendencia continúa, la tasa de extracción podría seguir creciendo este año, "lo que impulsaría una caída en el stock de novillos en 2019, condicionando la oferta de carne futura".
Hembras
Por el lado de las hembras, a raíz de la escasez de pasto y por la relación entre el precio de la vaquillona preñada y vaquillona para faena (cercana a 1,1), se está registrando un aumento de la participación en términos absolutos y porcentuales en la faena total.
"En los datos de la última encuesta SEA, se refleja una caída del 20 por ciento en las expectativas para crecer en vientres y a su vez aumentó en un 30 por ciento la cantidad de productores con intensión de disminuir su rodeo reproductivo", advirtió CREA según Agrovoz.
Sin embargo, aclaró que "esta mayor participación de hembras en la faena, con valores actuales superiores al 44 por ciento, no necesariamente implica entrar ya en una fase de liquidación. La nueva configuración del stock nacional, donde la recuperación de cabezas posterior al 2008 se ha dado principalmente por crecimiento de hembras, hace que el valor de equilibrio sea superior permitiendo, hasta un 47 por ciento de hembras en la faena sin comprometer el stock de vacas del siguiente año".
De este modo, el escenario para las hembras es distinto al de los machos: sumarían más oferta de carne en el mercado, aumentando la faena, pero aún sin presionar o retrasando el cambio de fase (de neutral a liquidación) y la recuperación de precios.
Precios
Bajo estas perspectivas de una producción de carne un 10 por ciento superior a la que originalmente se preveía, "la consecuencia será un impacto negativo en los precios de la hacienda", subrayó CREA.
En concreto, la entidad estimó que el precio real del novillo podría caer entre 10 y 16 por ciento en valores constantes, lo que implica que la evolución del precio en moneda corriente sería menor a la inflación proyectada para el 2018.
Sin embargo, si efectivamente la oferta de novillos es menor para el ciclo 2019/20, "sería esperable que el precio de la hacienda suba por encima de la inflación", completó CREA.
Y añadió: "Esto impulsaría la retención de hembras y machos, generando instantáneamente escasez de oferta que empujaría aún más el valor de la hacienda, iniciando una nueva fase del ciclo ganadero".
"En función de lo antes descripto, el aumento de la tasa de faena impulsada por la caída en la productividad forrajera consecuencia de la fuerte sequía y dadas las condiciones estructurales actuales de la ganadería argentina, se espera un cambio de fase dentro del ciclo ganadero. Lo difícil y hasta el momento poco factible, es predecir en qué momento se va a dar", concluyó CREA.