Un trabajo de la unidad integrada INTA Balcarce – Facultad de Agrarias UNMdP analiza los factores que apuntalan la producción de carne mediante una adecuada rotación del pastoreo de estas gramíneas
La semana pasada fue publicado un trabajo realizado por la Unidad Integrada EEA INTA Balcarce y la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNMdP titulado "¿Cada cuánto damos la vuelta en pastoreos de Festuca?", que analiza los factores que deben confluir para una óptima producción de carne pastoril en festucas, presentando la producción de forraje como presupuesto fundamental y el manejo del pastoreo como punto de contacto entre ambos.
El trabajo, incluido en la edición 137 mayo junio 2021 de la revista Visión Rural de INTA, lleva la firma de los ingenieros agrónomos Germán Berone, Paulo Recavarren y María Alejandra Marino. Además de presentar información de referencia en términos de producción y factores climáticos, sino que además brinda herramientas de utilización práctica e inmediata.
"Germán es responsable del grupo de manejo de pasturas en INTA Balcarce y docente de la Facultad de Ciencias Agrarias, y Alejandra, especialista en fertilización de pasturas, también participa en el grupo como docente de la Facultad", contó a ZonaCampo el extensionista local Paulo Recavarren.
"La idea surgió, como hemos charlado muchas veces, porque en general vemos que los resultados que brindan las pasturas no son lo que uno espera cuando invierte en sembrarlas. Si bien tiene mucho que ver con qué especie elegiste, cómo la sembraste, si hiciste los trabajos bien, también se pierde mucho en el manejo", agregó.
Es por este motivo que, según el entrevistado, la idea central fue dar pautas prácticas que orienten el manejo del pastoreo sobre todo dos momentos clave, la entrada a pastorear y la salida.
"Puede hacerse pesando el pasto, cortándolo, midiendo la altura, mirando un satélite, pero apuntamos a la parte práctica, por lo cual nos parecía interesante presentar el trabajo. Nuestro objetivo es dar herramientas para evitar los sobrepastoreos, que son bastante frecuentes sobre todo en los períodos que van de abril, mayo a septiembre, y también amortiguar un poco el efecto de los subpastoreos evitando que se mueran hojas sin pastorearlas en el período que va de octubre a marzo", subrayó.
"Apuntamos a herramientas bien prácticas para no andar perdiendo tiempo mirando los pastos, aunque también naturalmente incorporamos información orientativa, datos de la EEA Balcarce de la parte de clima y también de la estación Olavarría del Servicio Meteorológico, tomamos los dos extremos del área de la Experimental, Balcarce que es un poco más templado y cerca del mar y Olavarría, que es más del tipo continental" apuntó.
Como conclusión, Recavarren hizo referencia al espíritu central del trabajo que ya se deja entrever en los primeros párrafos. "El objetivo final que buscamos es concientizar en que está bien enfocarse en el estado de la hacienda, pero también es importante mirar el pasto porque en una producción ganadera en pastoreo directo los dos factores confluyen, a producción animal en condiciones, compartiendo el mismo insumo básico, las hojas de mayor producción fotosintéticas que son a la vez las de mayor valor nutritivo", concluyó.
Ingresá acá para descargar el archivo del trabajo en PDF
O acá para leer la revista completa: https://inta.gob.ar/documentos/revista-vision-rural-no-137-mayo-junio-2021