Tiene lugar en Cabaña La Soñada y es la primera vez que se realiza en la provincia de Buenos Aires, organizada en conjunto por la Asoc. Arg. de Angus y la regional CREA Bonaerense Sudoeste . Mirá las fotos y el video con toda la información
El jueves 16 de noviembre tuvo lugar la admisión y control sanitario de toros en un evento que representa un hito ganadero regional: la primera edición de la prueba pastoril angus en provincia de Buenos Aires, organizada en conjunto por la Asociación Argentina de Angus y la regional CREA Bonaerense Sudoeste, y que se lleva a cabo en Cabaña La Soñada de Alberto Alem y María Esther Cier.
El programa se desarrollará durante los próximos 9 o 10 meses, en el curso de los cuales se irán realizando juras, pruebas y mediciones a los 65 toros admitidos provenientes de 25 cabañas, y culminará con un remate. Además del valor social que representa, la prueba pastoril genera valiosa información que será puesta a disposición de los productores apuntalando genotípica y fenotípicamente a la raza.
Bernardo Laulhé, productor y miembro de CREA SUO remarcó la importancia de la organización en conjunto. "Todo esto nace principalmente de lograr que dos instituciones, una institución que es muy técnica, se fusione con algo que es una raza de primera línea, para lograr una búsqueda de crecimiento y de conocimientos, y poder mostrarles a todos los productores del sector ganadero la eficiencia de los toros, criados a pasto, mostrar resultados sobre algo real en la región sudoeste", aseguró.
Destacó además que "la idea de las tres juras es que venga a participar público en general, y vengan a conocer todo lo que estamos haciendo en esta prueba pastoril que dura unos nueve meses. La idea es venir a hacer la jura y en conjunto armar una historia técnica de cómo funciona y de cuál es el trayecto del inicio al final, transmitir cómo se van generando los datos para que la gente tenga conocimiento de dónde nacen y la importancia de los dato al ir a leerlos".
Por su parte, el productor Martín Tinello director de la Asociación Argentina de Angus y coordinador del Circuito Angus Bonaerense, detalló que son 65 los toros ingresados, provenientes de 25 cabañas en una jornada de admisión enmarcada en un clima ideal.
"Era un objetivo que nos habíamos planteado para nuestro circuito. Es una prueba pastoril que la tienen otros circuitos de hace muchos años, como el circuito Angus del Centro, Angus del Litoral, también la Patagonia, el circuito Pampeano, nos faltaba nosotros implementarla en el circuito Bonaerense. Es un lote de toros aportados por distintas cabañas de la provincia de Buenos Aires, que vamos a estar recriándolos todos juntos y con muchísima información", expresó Tinello, que también participa como cabañero en la prueba.
"Se va a obtener un índice fenotípico de cada uno de los animales, van a participar en tres juras fenotípicas con distintos jurados. Después va a haber un índice de carcasa por mediciones ecográficas de área de ojo bife, de grasa intramuscular, un índice de ganancia de peso diaria, después también para compararlos entre ellos, y un índice reproductivo, que va a estar determinado por la circunferencia escrotal y la tonicidad testicular. Además, los toros van a salir después con un análisis de calidad seminal y también DEP´s genómicos que vamos a estar haciendo desde Angus, con el convenio que tenemos con el INTA. Así que va a ser una información muy completa y muy útil para todos los criadores de la provincia de Buenos Aires o de otras provincias que quieran acercarse, acompañarnos y llevarse el mejor reproductor para mejorar la característica que necesiten en su rodeo".
Si bien las fechas de las juras son tentativas, la idea es hacerlas a principios de abril, mediados de junio y mediados de agosto, enmarcadas además en un ciclo de charlas de interés a disposición de todos aquellos criadores interesados en obtener información y en mejorar el trabajo con sus animales, agregó Tinello.
Por su parte, el anfitrión Alberto Alem enfatizó el rol social de la prueba. "Lo más importante es la buena predisposición de la gente, de los cabañeros, todos muy contentos. Es bueno para que nos conozcamos, para que veamos. La prueba pastoril es algo que nunca se hizo en la provincia, creo que va a ser un antes y un después. Se va a terminar un poco el mito de la comida. La prueba termina en septiembre del año que viene con la venta, pero a lo largo del año se hacen tres juras y va a ir un puntaje por cada parámetro, no solo ganancia de peso, también fertilidad, fenotipo, genotipo, porque se hace un estudio genómico. Se van a traer los toros a la mañana, vamos a comer un asado o alguna cosa, vamos a traer una carpa, y la idea es que vengan los productores, y después a la tarde se van a hacer charlas sobre la prueba, y charlas de otro tipo con especialistas de cada tema", indicó.
"Va a haber camaradería y va a haber parte técnica. La idea es que todos la pasemos bien, y van a estar todos los toros juntos, que eso también es un desafío para mí, porque va a haber casi 70 toros todos juntos en un potrero con todos los inconvenientes que trae, pero bueno, ese es el desafío. Y bueno, la verdad que muy contento, porque siempre me gustó este tipo de producción a pasto. Después, lo que está bueno también en las juras, nadie sabe quién es el toro, o sea, los jurados van a ver los toros, los van a seleccionar", concluyó.