El reconocido especialista disertó acerca de los desafíos y oportunidades que enfrenta la ganadería ante los escenarios actuales cambiantes. Tonelli estará presente en la jornada "La Ganadería que Viene", el 15 y 16 de junio.
"Las nuevas perspectivas para el sector ganadero: los desafíos y oportunidades que generan los escenarios cambiantes", fue la temática que abordaron el Lic. Víctor Tonelli y el MV Nicolás Palacio, coordinador Técnico de CDV el pasado 5 de mayo en la Sociedad Rural de Jesús María, Córdoba.
Las charlas tuvieron lugar en el marco de la campaña de #CDVac 48hs, una gira federal organizada por Laboratorio CDV, para promover espacios de reflexión y diálogo sobre la sanidad animal y su impacto en la producción. Es una iniciativa recorrerá varias plazas del país con el fin de brindar mayores conocimientos sobre cómo proteger contra las principales enfermedades de los bovinos que son prevenibles con la aplicación de vacunas y es 100% gratuita para productores y veterinarios, incluyendo diferentes acciones relacionadas con la prevención y capacitación como: contenido técnico, actividades lúdicas, sorteos y promociones.
Víctor Tonelli es una de las personalidades que disertará en Olavarría el próximo 15 y 16 de junio en la jornada organizada por ZonaCampo "La Ganadería que Viene", cuya primera edición estará enfocada en "Bienestar Animal, su impacto económico y productivo", y en la cual CDV también estará presente como no podía ser de otra manera.
El problema que atraviesa actualmente la ganadería no obedece solo a causas locales. Factores como la guerra en Europa del Este, la pospandemia, la fiebre porcina africana y colapsos bancarios y financieros internacionales se suman a crisis ambientales globales y una sequía a nivel país de proporciones históricas.
Respecto de la situación local, la producción ganadera enfrenta precios amesetados y pérdida de rentabilidad. El mercado de Argentina ha sido un claro ejemplo de cómo la seca es el factor que más ha impactado en el resultado del negocio.
La temporada de servicio ha culminado en prácticamente todo el país y la sequía ha impactado entre un 75 y 80% del stock argentino, lo cual se espera que haya generado una fuerte caída en los niveles de preñez, con una baja de entre un 6 y un 8 % en relación a los promedios habituales. Esto representa alrededor de 1,5 millones de vacas adicionales vacías que provocarán una caída de alrededor de 1,3 millones de terneros menos impactando negativamente sobre los resultados del 2024.
En palabras del Lic. Víctor Tonelli: "este alto volumen adicional de ganado sin reproducción impulsa una sobreoferta en el mercado, incrementando los índices de faena de vacas en el primer trimestre de 2023 en un 27% respecto del primer trimestre del año pasado. Esta cifra es elevada y se espera que continúe en alza para los próximos meses impactando en la baja de precios que profundiza las pérdidas de rentabilidad cuando se suma al retraso de los valores de mercado de los terneros", señaló.
El total de terneros con datos a diciembre 2022 ascendió a 15,4 millones, dando las cifras más elevadas de los últimos 10 años, con lo que también existe una sobre oferta de terneros que los productores se ven obligados a liquidar para generar un mayor equilibrio entre oferta y carga. Esto provoca una baja de precio de entre el 5 y 10%. Este escenario, por otro lado, genera oportunidades para los engordadores a corral, a pesar de la suba del maíz. Los corrales están llenos y con un nivel muy superior: en el primer trimestre han superado un 37% lo cual también atenta contra la recuperación del precio del ternero.
El horizonte cambiaría a partir del mes de junio ya que la buena noticia es que con la llegada del fenómeno de "El Niño", que se espera ofrezca un otoño y un invierno con lluvias que se acercarán a los valores estadísticamente normales, podríamos tener una recuperación de la oferta forrajera para la primavera, donde se prevé una suba de precio del valor de la carne importante.
El futuro que se vislumbra entre el 2023 y 2025 para los productos con destino a exportación también es positivo ya que se prevé una demanda de carne importante, y Argentina cuenta con una industria frigorífica preparada para las altas exigencias de los mercados internacionales.