Todos la conocimos como la maestra rural de Mapis, la del premio, pero esta docente tiene mucho más para contarnos sobre su vida, la educación rural y de que se trata esto de seguir educando en tiempo de pandemia
Luciana Pedernera, para ZonaCampo
Silvana Arnaudo, es docente de la escuela N° 35 José Lamas de Mapís, y en esta entrevista reflejamos el vivo compartido el 6 de junio en el Instagram de @mujeres.rurales. Silvana cuenta su experiencia de vivir en la escuela, el haber sido docente de sus hijos, el amor por lo que hace y las posibilidades que aún faltan para que el contexto educativo rural tenga acceso al derecho de conectividad.
Para ella, Silvana, que en su andar educativo recorre 60 kilómetros de ruta y alrededor de 55 kilómetros de calle de tierra "El amor de los alumnos es lo más lindo, que te puedan saludar y que ye llamen o que te hablen"
Silvana recibió su titulo de docente en 1994, nativa de La Pampa,después de algunas suplencias en escuelas rurales de la zona en la que residía viajo a Buenos Aires por cuestiones laborales acompañando a su esposo.Todo hasta que Mapis la adoptó como parte de su comunidad, no es para menos, la dulzura y calidez de la seño Silvana conquistan el corazón de todo aquel que logre escucharla. Su conexión la escuela primero fue para llevar a sus niños al jardín "y bueno, empecé así a ir a la escuela pero no estaba en mi cabeza volver a dedicarme a la docencia".
La maestra de la escuela, en ese entonces era Fernanda, referente principal en la insistencia de que ella se inscribiera en la provincia de Buenos Aires para poder enseñar en alguna escuela, aunque no pensó que esa oportunidad llegaría tan pronto. Fernanda embarazada, debió dejar su cargo momentáneamente por reposo estricto y era el momento de que Silvana aceptara o no, tomar ese cargo "no sabía que decir, no tenia guardapolvo, no tenía nada y bueno, su insistencia hizo que venga yque tome el cargo, sabemos que Mapís está muy lejos y que no era tan fácil que alguien acepte. Y bueno, tomé una suplencia muy larga en el año 2009 desde junio hasta diciembre que ella se reincorporo, en marzo volvió y en abril renunció, así que volví a designación, tome el cargo y todavía estoy". El 2 de junio se cumplieron 11 años de ese momento.
Su vida es de lunes a viernes en Mapis, mientras que sábados y domingos, Olavarría la recibe. La cuarentena cambio un poco los contextos pero habitualmente la escuela es el hogar que comparte junto a sus dos hijos y a María Paz Criante la seño de inicial.
Lucia y Santiago, sus hijos
"Lucia tiene 14 y Santiago tiene 12, gracias a dios dejaron de ser mis alumnos, porque también fueron mis alumnos" así expresa Silvana, con una sonrisa de alivió, cosas de la educación rural. Ahora, ambos, transitan la secundaria en el CEPT de Arboledas y ella indica que "al estar yo todas las semanas me queda muy cómodo el CEPT y la verdad que me gusta, me gusta la modalidad, me gusta ese CEPT, hay profesores muy buenos, con mucha dedicación y mucha contención, la verdad que lo elegiría".
Esa combinación de ser mamá y docente algo que ella definió como complicado "pero bueno, en Mapís no hay otra posibilidad, fueron mis alumnos los seis años así que bueno, esas cosas que tiene ser mama y docente al mismo tiempo, no es fácil para ellos". Silvana cree que sufren y sufrieron su rol como docente y mamá, ella también paso por esas sensaciones y confiesa "como que las docentes con nuestros hijos somos más exigentes no porque tienen que ser mejores sino porque por ahí tienen que dar el ejemplo", ni hablar de las veces que se mezclaban un poco los roles en la cabeza de los chicos"por ahí en casa decían 'seño' y 'a no, en casa se te puede decir mama, en la escuela tenemos que decirte seño'" esas cosas que para ella tienen que ver también con el respeto a sus pares, sus compañeros ya que todos están en la misma posición.
Las maestras rurales, referentes de las comunidades
Para llegar a Mapís quienes no conocen el recorrido deben saber que son 60 kilómetros de ruta 226, hasta llegar al puente de Blanca Grande y después 55 kilómetros de camino de tierra "que se hacen bastante pesaditos pero bueno, son 125 kilómetros más o menos desde Olavarría". En Mapís son 140 habitantes que están distribuidos en la zona rural. "Mapís no tiene población, de lunes a viernes estamos nosotras y un habitante más que vive en allí. Después esta la capilla, el club que se usa para eventos que hace la escuela, el almacén que cerró hace dos o tres años y el museo que surge también de un proyecto de la escuela para el bicentenario de Mapis".
"Somos una gran familia, nos conocemos todos obviamente, conocemos a los chicos en profundidad, hay un vínculo muy especial", tuvo la posibilidad de acompañar a varios chicos que hicieron desde primero a sexto con ella, es por eso que agrega "vos ya conoces cada cosa, cada gesto y mirarlos en complicidad, es hermoso. Mirar a un nene y saber lo que está pensando y él sabe lo que yo estoy pensando, esas son cosas, te llenan el lama, es hermosísimo".
Indispensable dejar de lado a las familias, quienes comparten muchas horas con ella "las mamás muchas de ellas van y esperan a sus chiquitos de la 13 hs hasta las 17 hs". Las reuniones de cooperadora son la excusa perfecta para fomentar el encuentro, fortalecer los vínculos, y en esa familia que han elegido disfrutar de asados. Los niños, los niños son los más felices en estos momentos donde se pueden encontrar y compartir "La escuela rural, es el único lugar donde los chicos se encuentran, no tienen otro momento entonces valoran el momento fuera de la escuela, cuando se hace una reunión de la cooperadora o algún evento".
Maestros Argentinos
Siempre intentando anotarse en distintos proyectos, para poder acercar más posibilidades a los chicos de la zona rural y respondiendo a problemáticas de la comunidad, coordinando con los contenidos del diseño curricular. Así fue,buscando cosas diferentes, apareció el concurso Maestros Argentinos, después que su inspectora valorara mucho su proyecto que actualmente hace cinco años viene trabajando. "En ese momento hacia tres años que veníamos con este proyecto de Hidatidosis, cuando decidimos anotarnos en maestro argentinos". Silvana comenta que pasaron unos meses y recibió un email que le decía que estaban entre los 20 proyectos elegidos de 1500 proyectos de todo el país, ella no recordaba dónde se había anotado, "esas cosas que te pasan de sorpresa y bueno estábamos entre los 20 ya, ahí era una alegría impresionante, no importaba, no teníamos un premio económico entre los 20 pero haber sido elegidos entre los 1500 de todo el país ya era muchísimo, estábamos felices, y bueno después fue todo una locura lo que fue pasando, inesperado".
De aquí en adelante, anécdotas emocionantes y de un esfuerzo conjunto, reviviendo cada momento, Silvana dice que "cuando nos llaman para avisarnos que estábamos entre los 20, nos avisan que teníamos que presentar un podscat, Luisina Gregorini recordara las veces que me ayudo a grabarlo, porque tenía que decir todo en muy poquito tiempo".Esto llevo al equipo a estar entre los 10 mejores del país "fue realmente terrible, no sabía que me iba a preguntar y todo era en una comunicación virtual obviamente con todo el jurado. Pero además de eso, contarte que nos designaban un día y un horario y nosotros en Mapis no teníamos señal y menos internet". María Marta una mujer de la comunidad la llevo hasta una estación de servicio de Bolívar desde allí hiciera la comunicación virtual "estábamos ahí y yo dije, hasta acá llegamos, la verdad que no esperaba mucho mas.Estaba feliz porque ya estábamos entre los 10 así que bueno, fue impresionante y seguían nombrando, ya en el tercer puesto, saltábamos, gritábamos, nadie entendía lo que pasaba, nosotros teníamos una felicidad enorme fue impresionante".
Como están enseñando en este contexto
"En realidad todos estamos haciendo un esfuerzo muy grande, todos vamos aprendiendo con la marcha. Esto de la virtualidad que para nosotros es difícil en el campo, la mayoría de nuestros alumnos no tienen conexión" así encuadra Silvana este momento de pandemia. Las actividades llegan a los chicos en formato papel, no hay otra opción, con algunos chicos puede comunicarse y mandarle videos explicativos, o solo para hablar, ella define que "Es momento de fortalecer vínculos. Los chicos hay algunos que la están pasando mal porque se empiezan a renegar, quiere ir a la escuela".
Nadie pensaba que esto se extendería tanto y aunque en el entorno rural la realidad es otra, los vínculos son el sostén de estas comunidades "desde los primeros días de marzo que no ven a sus compañeros es muy fuerte lo que pasa con ellos, mas allá de lo que decimos que en el campo pueden andar afuera, pueden correr, sí es otra historia pero los vínculos. Los chicos acá en la ciudad tienen internet, se van comunicando ahora con todas las aplicaciones. Pero allá para nosotros es algo imposible".
Actualmente el equipo docente esta viajando a la escuela, cada tanto acercan a sus alumnos la continuidad pedagógica y alimentos Silvana aclara que "con alguna familia nos encontramos en la entrada de algún campo si nos queda de pasada y si no llegan hasta la escuela, ellos aparecen todos, la familia entera. Lo viven diferente, pero bueno, respetando las distancias, ellos ya saben por un mensajito que la seño va a ir y que hay que mantener ciertos cuidados" a un costado quedaron los gestos de esos pequeños inocentes que corren para acoger entre sus brazos a 'la seño'. En el último viaje les regalaron barbijos y ellos "estaban re contentos".
Los días pasan y las actividades rondan entre los cuadernillos que envían desde el ministerio y todo aquello creativo que los ayude a llevar un poquito mejor esta situación "les comparto juegos, bailes divertidos para que hagan en familia con sus padres y hermanos y que todo lo registren, algunos no me lo pueden enviar pero bueno cuando volvamos vamos a tratar de recopilar todo eso". Aclara que están trabajando bien, que hay chicos que responden mejor, no porque sean mejores sino porque no todos están tomando esta situación de la misma forma
"Me da mucho orgullo hablar de mis compañeros, también del equipo que tengo ahora, Paz, María Paz Criante es lo mas, llego el año pasado recién recibida y compartimos todo el año pasado, este año empezamos y arranco el aislamiento", Silvana destaca la labor de María Paz y dice que "Paz fue lo mejor que nos pudo pasar. Agradecerle a ella que es con quien convivimos de lunes a viernes y que es excelente compañera. Lo destaco porque a veces no es tan fácil, hay que convivir. La cocina es chiquita, tenemos una habitación para los 4 y la verdad que Paz es divertida, siempre me acompaña"