Llevada adelante por un equipo de innovadores argentinos logra a través de la nanotecnología reducir a la mínima expresión el tamaño de cada partícula aplicada
Reducir la contaminación, proteger el medioambiente y la salud de las personas. Esas son las principales ideas detrás de Nanótica Agro, una startup creada por Julio Laurenza (36 años) y Matías Badano (28), el primero biotecnólogo y experto en nanotecnología, el segundo en marketing internacional.
"Nos dedicamos 100 % a hacer nanotecnología para que el productor agropecuario pueda reducir sus costos y la contaminación principalmente", ha explicado Badano. Con las nanocápsulas de óxido de zinc para destruir hongos se reducen las dosis de agroquímicos en un 50 %, según Badano.
La nanoencapsulación es un método de encapsulación y liberación controladamediante vehículos minúsculos de 100 a 250 nanómetros –mucho más pequeños que un cabello humano, que mide 150.000 nanómetros de diámetro– con una estructura bicapa lipídica modificable (una membrana delgada formada por dos capas de moléculas de lípidos alrededor de las células). La similitud con las células permite una mejor absorción.
"Hacemos que la membrana de la cápsula sea muy parecida a la membrana de la plantapara que pueda penetrar más rápido. Si es una cápsula de liberación lenta, por ejemplo, un insecticida, hacemos una cápsula que vaya liberando poco a poco el principio activo para generar mayor cobertura de la planta", ha explicado, puntualizando que la nanoencapsulación también facilita la manipulación y la distribución de los pesticidas y fertilizantes. "Mejoramos la optimización del delivery (entrega)", ha asegurado.
El primer objetivo de la empresa fueron los cultivos locales de soja –Argentina es gran productor de este alimento–, maíz y trigo. Recientemente empezaron a trabajar con plantaciones de arroz, limón, maní (cacahuete), y hace poco tiempo también con bananas, para combatir un hongo que llegó a Latinoamérica, proveniente de la India y África.
La startup sigue en el proceso de generación de tecnologías, todavía no vende los productos. Sus ensayos los desarrollan en la provincia de Buenos Aires, en Córdoba, Rosario y Tucumán, tanto en campos de productores como en universidades y empresas.
Laurenza y Badano se conocieron a raíz de FosterJobs hace tres años, una red social lanzada por el último, donde los estudiantes podían buscar sus primeras experiencias profesionales. Hace cerca de nueve meses fue cuando decidieron fusionar los conocimientos en nanotecnología de Laurenza con las competencias en negocios de Badano. Así es como nació la startup.
La nanotecnología supone un reto para la industria agroquímica. "Nadie está utilizando nanotecnología para el agro porque, al tratarse de partículas muy muy chiquititas, invisibles al ojo humano, tienden a juntarse con el tiempo", ha detallado Badano.
En un lapso de 30 a 40 días, las partículas tienden a juntarse por el proceso de agregación de la materia, con lo cual se pierde la efectividad de la tecnología, ha puntualizado el emprendedor argentino, razón por la cual las multinacionales no acceden a ella. "Cuando ellas envasan pueden pasar dos años hasta que el producto es usado", ha precisado. La startup planea en un futuro desarrollar nanotecnología personalizada a los principios activos y fórmulas de empresas de agroquímicos.
Para echar a andar el proyecto buscaron, en una primera ronda, inversiones privadas, que les ayudaran a llevar a cabo la operación, desde África hasta Israel, desde laboratorios hasta profesores o empresarios de multinacionales. Gracias a ello han logrado levantar 300.000 dólares, ha asegurado Badano.
Pese a los pocos meses de vida, Nanótica no para de crecer en número de personas y en capital. La empresa cuenta ya con seis personas y tiene la intención de ser 11 en poco tiempo. Además, los grandes productores a los que les dieron a probar la novedosa tecnología se interesaron también en el negocio, con lo cual se abre la posibilidad de una posible ronda de inversión dentro de los próximos meses que le permitiría traspasar las fronteras de Argentina y conquistar los mercados de Brasil, Estados Unidos, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Perú y Ecuador.
Fuente: www.innovaspain.com