Además del cambio de estrategia a nivel nacional que obliga a vacunar todos los animales, la fundación local será más estricta en el cumplimiento de normas preexistentes
Exclusivo ZonaCampo
Una de las noticias que más impactó en el ánimo de los productores ganaderos del partido durante la semana que pasó, fue el cambio de estrategia decidido por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) mediante el cual la vacunación de aftosa de marzo/abril debe incluir a todas las categorías. A nivel local, desde la Fundación para la Sanidad Ganadera (FunSaGa), se informó asimismo que se observará más estrictamente el cumplimiento de normas preexistentes.
"El próximo 9 de marzo arranca el primer período de vacunación de este año, que por decisión oficial y de acuerdo a lo comunicado por SeNasa por distintas vías, la vacunación vuelve a ser total. Es decir, nuevamente y al igual que hicimos en primavera, tenemos que vacunar la totalidad de la hacienda", explicó a ZonaCampo el veterinario Mario Carpi, Coordinador de la FunSaGa, la fundación sanitaria local.
Este cambio no fue, naturalmente, bien recibido por los productores porque el costo de una campaña "grande" es -cuando menos-, el doble de una campaña "chica", y por lo general supera con creces esta diferencia. La campaña de menores cumple la función de revacunar a los animales más nuevos, con fines inmunitarios, por lo cual más de un productor nos comentó por privado que no se percibe con claridad la finalidad sanitaria del cambio.
"La decisión surge a raíz de la necesidad de unificar todo el territorio nacional en unos mismos tiempos de vacunación. Tendremos que adaptarnos a esta nueva situación, esta vacunación será total y la de primavera pasará a ser la de menores. Para el caso es lo mismo, la situación es igual y la cantidad de animales por año va a ser la misma, la diferencia es que por esta vez se nos han encimado dos vacunaciones totales", explicó Carpi.
La campaña comienza en Olavarría el 9 de marzo y concluye el 8 de mayo, por lo cual el coordinador consideró que los días son lo suficientemente largos como para concluir los trabajos sin contratiempos, incluso a pesar de ciertas modificaciones que se harán a nivel local referidas a la aplicación concreta de exigencias legales.
"A raíz de ciertas falencias que hemos detectado en el desarrollo de la campaña en todos estos años, y para evitar que se agraven, hemos generado una serie de mecanismos para dar cumplimiento efectivo a normas históricas cuya aplicación, por diversas razones, venía siendo demasiado flexible, y vamos a volver a ser estrictos tanto respecto de aftosa como de brucelosis para las terneras", enfatizó Carpi.
"En principio, cualquier movimiento de hacienda, con cualquier destino, debe hacerse con la hacienda vacunada previamente. Para eso se va a exigir que el trabajo de vacunación esté realizado, y la vacuna de aftosa o brucelosis comprada, con la anticipación necesaria para que el acta esté cargada en el sistema SIGSA al menos 24 horas antes del movimiento", agregó.
"Para que quede claro, el productor debe acordar con el veterinario, debe avisar en la fundación, programar el trabajo y comprar la vacuna con la suficiente anticipación, y luego de hacer el trabajo deberá traernos el acta 24 horas antes de realizar un movimiento. No puede haber actas de apuro o a culata de camión, la documentación para el traslado debe estar lista uno o dos días antes de cada movimiento", remarcó.
Otra de las exigencias consiste en que no se admitirán actas que no sean las originales en papel, con todos los datos y firmas de productor y veterinario intervinientes. Es decir, debe ser la denominada "acta papel", no sirviendo por lo tanto fotos ni envíos on line, solo se asentarán los documentos originales oficiales.
"Sabemos que el costo de la vacuna es una limitante importante, por lo cual tanto las veterinarias como la fundación estamos evaluando otorgar facilidades en el pago, y desde ya desde FunSaGa estamos a disposición de todos para solucionar todo problema que pueda ir surgiendo, no solamente respecto de la comercialización de la vacuna, sino también lo relacionado a la concreción de los trabajos", indicó Carpi.
"Respecto de la vacunación de brucelosis, debe ser simultánea. El tope máximo para la vacunación de las terneras son los 8 meses de edad. Por este motivo, siendo que en este período del año la vacunación se encima con otros trabajos, como los tactos, el destete y la salida de los terneros, recomendamos que el productor coordine, programe sus tareas con anticipación y no espere hasta último momento para el traslado", manifestó.
Finalmente, Mario Carpi remarcó que una de las principales complicaciones que generan retraso en la carga de actas es la diferencia de stock, ya que al finalizar los trabajos las actas llegan con animales en diferentes categorías, y con importantes diferencias de stock respecto de los históricos y oficiales que figuran en SIGSA. Ingresar las actas tal como vienen genera un problema para el productor, puesto que esas diferencias son contravenciones y terminan en multas..
"Por eso siempre pedimos a los productores que, antes de realizar el trabajo, tengan en cuenta el stock de hacienda, que averigüen en SENASA o en la Fundación, o por autogestión, denuncien nuevos nacimientos, cierren los DTe cuando hay ingreso o salida de hacienda, y así no aparezcan estas diferencias que nos hacen dificultosa o incluso imposible la carga del acta de vacunación", concluyó.