El INTA analiza la calidad de la cebada cervecera bonaerense
Lo hace a través del Laboratorio de calidad de cebada y malta Bordenave, donde funciona una micromaltería experimental automatizada
En los últimos años, el aumento en la demanda local de malta, impulsó la producción de cebada cervecera. Para determinar la calidad comercial e industrial de la malta, el INTA Bordenave –Buenos Aires– tiene el único laboratorio de origen público del país. Trabaja integrado al Programa de Mejoramiento genético de cebada del INTA y presta servicios a terceros. La información generada permite, además, optimizar el uso de los recursos y aumentar la eficiencia de producción.
Verónica Conti, responsable del Laboratorio del INTA, señaló que "los análisis de calidad comercial e industrial de cebada son clave para la obtención de nuevas variedades en los Programas de Mejoramiento Genético de Cebada".
"El análisis que se realiza en el laboratorio permite conocer la calidad del grano producido, y esa información es fundamental para la comercialización de la cebada", expresó Conti quien agregó: "Además, con los resultados es posible ajustar las tecnologías de manejo para aumentar la eficiencia de producción".
Instalado en 2010, en el Laboratorio de calidad de cebada y malta de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Bordenave funciona una micromaltería experimental automatizada. "Este equipamiento específico nos permite analizar la calidad industrial de la malta a partir de muestras de menos de 1 Kg de cebada", indicó Conti.
Para conocer la calidad comercial de la cebada cervecera, el laboratorio realiza análisis de calibre del grano, porcentaje de humedad y porcentaje de proteína. "Estas determinaciones se realizan sobre grano limpio y la metodología no es destructiva, por lo cual puede reutilizarse la misma muestra para las diferentes mediciones, e incluso para su posterior malteo", aclaró Conti.
Por otro lado, los análisis para calidad industrial incluyen porcentaje de humedad en malta, porcentaje de proteína en malta (total y soluble), porcentaje de friabilidad, Índice de Kolbach estimado, porcentaje de extracto Congreso, tiempo de sacarificación (min) y tiempo de filtración (min), entre otros. "Para este examen se puede partir de grano limpio o malta y la metodología es destructiva", advirtió la Responsable del Laboratorio.
Los análisis que se realizan en el Laboratorio cumplen con la Norma V de Calidad y Comercialización de Cebada, Resolución 2013 de SENASA, vigente a partir del primero de octubre de 2014. Asimismo, las determinaciones de calidad industrial se realizan según métodos estandarizados fijados por normas Analytica-EBC (European Brewery Convention).
Desde hace más de 10 años, el grupo de Mejoramiento y Calidad Vegetal de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Bordenave coordina la Red Nacional de Cebada Cervecera. "Esta articulación público-privada aporta información y credibilidad a la cadena de valor de la cebada", afirmó Conti y agregó: "Dentro de este marco, nuestro laboratorio funciona como un complemento fundamental".
“La fina viene muy bien pero para que se concrete en los rindes es clave el monitoreo continuo”
El ingeniero agrónomo Ricardo Silvestro, de la firma Rindes y Cultivos DAS, analiza la campaña de trigo y cebada. Explica cómo los vaivenes de clima afectaron a los cultivos y la importancia de las aplicaciones preventivas para controlar enfermedades
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Verónica Conti, responsable del Laboratorio del INTA, señaló que "los análisis de calidad comercial e industrial de cebada son clave para la obtención de nuevas variedades en los Programas de Mejoramiento Genético de Cebada".
"El análisis que se realiza en el laboratorio permite conocer la calidad del grano producido, y esa información es fundamental para la comercialización de la cebada", expresó Conti quien agregó: "Además, con los resultados es posible ajustar las tecnologías de manejo para aumentar la eficiencia de producción".
Instalado en 2010, en el Laboratorio de calidad de cebada y malta de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Bordenave funciona una micromaltería experimental automatizada. "Este equipamiento específico nos permite analizar la calidad industrial de la malta a partir de muestras de menos de 1 Kg de cebada", indicó Conti.
Para conocer la calidad comercial de la cebada cervecera, el laboratorio realiza análisis de calibre del grano, porcentaje de humedad y porcentaje de proteína. "Estas determinaciones se realizan sobre grano limpio y la metodología no es destructiva, por lo cual puede reutilizarse la misma muestra para las diferentes mediciones, e incluso para su posterior malteo", aclaró Conti.
Por otro lado, los análisis para calidad industrial incluyen porcentaje de humedad en malta, porcentaje de proteína en malta (total y soluble), porcentaje de friabilidad, Índice de Kolbach estimado, porcentaje de extracto Congreso, tiempo de sacarificación (min) y tiempo de filtración (min), entre otros. "Para este examen se puede partir de grano limpio o malta y la metodología es destructiva", advirtió la Responsable del Laboratorio.
Los análisis que se realizan en el Laboratorio cumplen con la Norma V de Calidad y Comercialización de Cebada, Resolución 2013 de SENASA, vigente a partir del primero de octubre de 2014. Asimismo, las determinaciones de calidad industrial se realizan según métodos estandarizados fijados por normas Analytica-EBC (European Brewery Convention).
Desde hace más de 10 años, el grupo de Mejoramiento y Calidad Vegetal de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Bordenave coordina la Red Nacional de Cebada Cervecera. "Esta articulación público-privada aporta información y credibilidad a la cadena de valor de la cebada", afirmó Conti y agregó: "Dentro de este marco, nuestro laboratorio funciona como un complemento fundamental".
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