Arnaldo Bintana, gerente de Molino Olavarría S.A., se refirió así respecto a la actualidad del cultivo. En la charla también recorrió otros temas del sector como mercado externo y actualidad del alpiste y la cebolla, dos de los productos que maneja habitualmente.  

 "El año comienza con una buena expectativa de exportación y buenos números respecto al mercado de la harina, debido principalmente a la mala cosecha en Brasil por exceso de agua" nos resume Bintana ante el pedido de plantear un panorama para el año que comienza.

Y agrega "obviamente con este panorama Brasil va a recibir más harina debido al el cambio de gobierno en Argentina y la liberación de la exportación. Históricamente nosotros le proveíamos 5 ó 6 millones de toneladas de las 11 que importaban. Cuando se aplicó la política de los ROE se empezó a exportar mucho menos y sobre todo a no cumplir. En ese momento Brasil comenzó a importar trigo americano y su trigo de mala calidad lo exportan. Este añoBrasil empieza a recibir nuevamente trigo argentino pero lamentablemente luego de varios años de restricciones a las exportaciones y sobre todo la falta de rentabilidad del productor, nuestro trigo perdió calidad"

Sobre este tema, Bintana detalla "Brasil siempre buscó trigos correctores con 10,5% de proteínas. Cualquier trigo argentino lo tenía sobradamente, pero por las razones que explicaba antes el productor dejó de comprar buena semilla panificable, dejó de fertilizar y de invertir en cada cosecha. Perdimos volumen pero también la calidad de nuestro trigo. Tenés un trigo de 9% de proteína que vale 50 ó 60 dólares menos quede 10,5%. Sumado a esto, el mercado brasilero nos pide ese trigo de más calidad y nosotros lamentablemente no lo tenemos. Este año están las cartas echadas, el desafío del sector triguero es recuperar los niveles de calidad históricos a partir del 2017" 

“El desafío del sector triguero es recuperar los niveles de calidad históricos a partir del 2017”

Sobre los motivos de este presente de la producción, nos cuenta "llegamos a esto por las malas políticas aplicadas. El sistema de ROES trababa el negocio y no había reglas claras como el campo necesita. Con la nueva realidad yo creo que el campo puede cambiar la ecuación en pocos meses. Es el único sector de la economía que puede hacerlo rápidamente. La tecnología está. El productor argentino sabe aplicarla, así que en poco tiempo se puede revertir. Obviamente que se requiere de inversión, más urea, estudios de suelos, etc pero si el mercado es claro y las posibilidades son concretas, estoy convencido que recuperaremos el camino perdido y no sólo la calidad sino el volumen. Hasta ahora sólo utilizaba lo mínimo del área triguera como rotación sin expectativas de rentabilidad, seguramente recuperaremos la cantidad de hectáreas dedicadas"

Otro de los productos que maneja Molino Olavarría S.A. es el alpiste, respecto a este cultivo destaca que "este año el área cultivada de alpiste creció muchísimo, creemos que va a sobrar mucho para el año que viene. El alpiste compite con el trigo. El precio debería haber subido, pero se incrementó por el dólar y no por la quita de retenciones. Esto se da porque el mercado brasilero está con excedente de alpiste. Ellos además de Argentina tienen a Canadá como proveedor, lo que incrementa aún más la oferta. Vemos, por la gran cantidad de oferta que tenemos que, aunque sin estadísticas precisas, tienen alpiste para dos años por los menos. Nuestro molino exportó unas 3.000 toneladas en 2015 y aspiramos como máximo a mantener ese número este año"

También nos traza un panorama sobre el mercado de la cebolla con Brasil. " El año pasado fracasaron las cosechas tanto en Argentina como en Brasil, por exceso de humedad muchos productores perdieron toda la producción por sanidad. Para este año, con otra muy mala cosecha en Brasil sobre todo de la cebolla caterinense, se especula que en marzo estaremos exportando cebolla argentina que justamente es el producto que ellos consumen además de la propia. Con este panorama, este año contaremos con cuatro galpones de empaque propio procesando cebolla producida en campos propios y arrendados en la zona de Choele Choel. Generalmente Brasil compra nuestra cebolla durante 4 meses, de marzo a junio. Tienen un consumo anual de 60 millones de bolsas y de nuestro país llegaron a importar 14 millones. Esperamos este año llegar a ese número o superarlo. En el 2015, sufrimos también la falta de calidad del producto pero una buena cebolla llegó a muy buenos valores. Esperamos este año una mejor calidad y redondear buenos envíos."

“Este año contaremos con cuatro galpones de empaque propio procesando cebolla “

La diversidad de productos que Molino Olavarría exporta, nos lleva a hablar sobre poroto negro. "El año pasado sembramos poroto negro con destino a Brasil en la zona de Olavarría, con buenos rindes. También compramos en la zona de Salta y lo envíamos a frontera. El brasilero lo consume diaramente, sobre todo de Río de Janeiro para el sur. También trabajamos con otros negocios específicos como cilantro, coliandro, lino y arvejas. Son mercados de muy poco volumen y muy sensibles a un exceso de producción. Si entra o sale un jugador del mercado el precio puede variar muchísimo, hasta el triple. No son mercados regulares. Hay momentos que la situación da como para que Brasil compre, y tratamos de hacerlo. Estamos aprendiendo obviamente. Es muy difícil manejar las calidades a la hora de comprar. Son productos para consumo humano y hay que extremar los cuidados para comprar calidad porque de fallar los embarques son devueltos, muy distinto por ejemplo a la soja donde te pagan menos perono hay devolución digamos".