Representantes de diferentes rubros de la cadena productiva agropecuaria nos cuentan sus experiencias a la hora de continuar trabajando durante la cuarentena  

Exclusivo ZonaCampo 

Tal y como se suponía, es muy probable que la cuarentena obligatoria establecida por el DNU 297/2020 se extienda hasta el 12 de abril, aunque todavía no hay anuncios oficiales ni se dieron a conocer los pormenores y si esta extensión llegaría solo hasta esa fecha o abarcaría todo el mes.

Para el campo, este anuncio no cambiaría demasiado la situación actual, porque en medio de todo esto, la actividad agropecuaria siguió su marcha. Como bien dijo uno de nuestros entrevistados hace algunos días respecto de la ganadería, "hablamos de seres vivos, no de bulones que se guardan para vender el mes que viene" (Ezequiel Hourcade, ver la nota completa haciendo click acá)

Pero esto no significa que no haya habido necesidad de adaptarse bastante y tomar los debidos recaudos para poder seguir trabajando. ZonaCampo entrevistó de manera virtual, a través de Whatsapp, a representantes de diferentes rubros del sector, quienes compartieron con nosotros sus vivencias en este entorno de emergencia sanitaria, y cómo se las han rebuscado para seguir adelante con sus actividades sin incurrir en riesgos, ni poner en riesgo al personal y a la sociedad toda, que es la destinataria final de la producción. 

Eduardo Alem, además de productor ganadero es veterinario y antepone su lógica profesional a la situación que estamos atravesando. "Cómo aprendimos en epidemiología,lo primero que hay que hacer es manejarse con responsabilidad y cómo pasa con cualquier virus, hay que evitar el contacto. En nuestro caso estamos en el campo haciendo la cuarentena en familia y trabajando. Se hacen los trabajos diarios y de urgencia. Hoy tenemos una césarea porque ya estamos con los partos de otoño. 

Nuestra producción es intensiva y tenemos más trabajo en el día a día que no se puede dejar de hacer. Al estar con mis hijos acá no necesito ayuda externa. Viajamos de a uno a buscar insumos a Olavarría y pospusimos todo lo que es obras en el campo tratando de tener los mínimos contactos posibles y aplicando básicamente sentido común para no propagar el virus"  

La harina es un insumo que no puede faltar en esta crisis sanitaria y desde Molino Olavarría aseguran que la situación "cambia día a día, lo de cada viernes queda viejo y tenemos que esperar a que comience cada semana para ver qué nos depara. Nosotros estamos produciendo pero el tema va a ser la movilidad para poder hacer el reparto y la cobranza, ya que no podemos cortar la cadena de pagos y la falta de clearing bancario podría llegar a complicar aún más. 

En cuanto a las medidas de prevención, estamos trabajando con la mitad del personal y tomando todas las medidas necesarias de distanciamiento y preventivas que corresponden. En cuanto a la cosecha se dejará en silobolsa en los campos hasta que se pueda sacar".  

Claudio Masson junto a sus hermanos tiene equipos de chacra y la cuarentena los sorprendió en medio de la campaña. "En estos momentos estamos trillando girasol. Estamos trabajando a ritmo habitual tomando todas las medidas de seguridad. En la máquina va una sola persona y tratamos de tener el menor contacto posible incluso los chicos encargados de los carros con los camiones. 

Estamos tratando de ir poco a Olavarría, sólo por urgencias aunque sea un riesgo lo tenemos que hacer porque la cosecha hay que levantarla. Lo más complicado es el tema de los camiones. En este momento estamos parados esperando que liberen mas camiones del puerto pero particularmente creo que lo más conveniente sería embolsar y dejar en el campo para tener el menor contacto posible hasta que esto pase".  

Desde Tubos Olavarría, su propietario Facundo Dragui aclara que "sólo estamos atendiendo emergencias de nuestros clientes y complicados con la reposición porque por ahora no hay transporte. Tratamos de proveer los repuestos necesarios para que los productores puedan seguir trabajando a la espera que la situación mejore y se normalice el abastecimiento".  

Guillermo Sorsoli, representante local de la firma Lartirigoyen & Oromí, cerró sus oficinas desde la semana pasada y, tanto él, como el resto del equipo está realizando ventas particulares vía telefónica. "Desde el viernes estamos vendiendo particular, por teléfono. Yo tengo una carga el día viernes, de una jaula doble y una simple. Vamos a en nuestra propia feria en Recalde para no ir a una balanza pública. Vamos de a uno en vehículos, el camionero debe venir sólo, quedarse en el camión y a la distancia lógica. La firma está haciendo en este momento una prueba piloto para este viernes realizar un remate por internet con casi 3000 cabezas. Mientras acá en Olavarría todo el equipo está con los teléfonos abiertos, por negocios particulares, por consultas, etc.

Por otro lado, los clientes me están preguntando por el remate de abril. Yo tengo feria propia, tengo pensado poner una fecha para abril. Sería al aire libre, con distancia y sin comida pero veremos cómo se va desarrollando el tema y la respuesta de las autoridades llegado el momento, pero los productores tienen cuentas para pagar y necesitan vender sin perder de vista que lo más importante es cuidarnos cada uno y de esa manera cuidarnos entre todos"  

Finalmente, Luis Lohidoy productor de ciclo completo junto a su hermano Pablo en Estancias El Porvenir, nos contó cómo impacta la situación en su establecimiento de encierre a corral. "Nuestro encierre ronda en los 500 animales, constante. No hemos tenido demasiados inconvenientes porque la provisión de alimento es, en un 95% es de propia producción, silo de maíz picado, cebada o maíz en grano, y se planificó como para que la cebada alcance hasta ahora que estamos por empezar a cosechar el maíz. Podemos estar un mes, un mes y medio más sin depender de llevar alimento de otro lado, y en ese momento empezaríamos a cosechar, así que si los contratistas llegan y si se da todo, climáticamente hablando, dentro de los cánones normales, no deberíamos tener problemas de abastecimiento. 

Con respecto al personal, los insumos los va a comprar solo una persona, en Lamadrid le hacen los controles, y después de la compra regresa. Movimiento de gente no hay si llegamos a cargar, le diremos al chofer que se quede adentro, se carga y se va. Se guarda la distancia, todo lo de rondas de mate o reunirnos en una casa no se hace, las veces que hemos tenido que ir al campo manejamos todo a campo abierto. La vacunación de aftosa ya la teníamos hecho, así que el establecimiento quedó tranquilo respecto de trabajos de manga, después hay dos personas con quienes nos manejamos por teléfono, así que no tenemos demasiada necesidad de ir. En el caso de ser necesario, iré yo solo o con mi hermano y tomando todos los recaudos cuando se comparte camioneta, y después allá intentaremos no estar cerca, desinfectarnos las manos, todo lo que se indica. El único problema lo tuvimos en la balanza del mixer que se rompió y no la podemos mandar a arreglar porque no hay nadie, pero como ya conocemos las proporciones nos arreglamos bien"