Según un informe del INTA, los productores ganaderos deberán estar atentos al impacto negativo que los excesos hídricos puedan ocasionar en el rodeo bovino.

Los pronósticos climáticos anticipan un verano lluvioso y con temperaturas superiores a la media en el NEA y el centro norte y este de la región pampeana.

En este contexto, los productores ganaderos deberán estar atentos al impacto que los excesos hídricos puedan ocasionar en el rodeo bovino y desde el INTA señalaron que será clave el bienestar animal del rodeo.

Natalia Aguilar, coordinadora de Proyecto Nacional de Bienestar Animal, explicó que para reducir este impacto, será fundamental mantener un control sanitario riguroso mediante el monitoreo de posibles síntomas de enfermedades infecciosas y actuar de manera inmediata.

Ante situaciones de crisis que se puedan generar a partir de excesos de lluvias, hay tres puntos a tener en cuenta: la hidratación de los animales, anticipar cualquier tipo de enfermedad infecciosa que pudiera producirse como consecuencia del hacinamiento y la alimentación del ganado ante una situación de emergencia.

Para la prevención de la aparición de enfermedades infecciosas, las recomendaciones del INTA pasan por controlar los efectos de la temperatura sobre los bovinos, buscar sombra y también incluir un calendario sanitario para enfermedades respiratorias y clostridiales.

En paralelo, se debe implementar un monitoreo sistemático para la identificación de aquellos animales que presenten algún tipo de sintomatología relacionada con enfermedades infecciosas y tratarlas con rapidez en caso de ser detectadas. 

En caso de inundaciones en el campo y posterior traslado de la hacienda, cuando llegue a su nuevo espacio se deben manejar con suavidad y sin apuros.

"Hay que dejar que el rodeo ingrese al campo tranquilo, darle agua fresca y darle tiempo a que se vaya adaptando al nuevo potrero", explicaron.

Y agregaron: "Cuando veamos que los animales están mucho más tranquilos, ahí vamos a pasar por la manga y vacunar".

Por otro lado, cuando se recibe animales en los corrales bajo estas situaciones, suele ser una cuestión crítica y terminan en confinamiento. Esta situación suele estar acompañada de crisis de disponibilidad de campos o de alojamiento para gran cantidad de animales.

Para cuidar la sanidad del rodeo, es importante realizar una clasificación de acuerdo con los requerimientos nutricionales de las distintas categorías, sin perder de vista la disponibilidad de los potreros. Otro punto importante es el riesgo de la presencia de plantas tóxicas, por lo tanto, es aconsejable evaluar la disponibilidad forrajera, para así poder determinar la carga animal.

En un contexto de temperaturas más elevadas, otra de las recomendaciones del INTA pasó por poner en práctica medidas sanitarias que incluyan vacunación, desparasitaciones, control de vectores, reconocimiento de plantas toxicas en los potreros o corrales utilizados.

Si se detectan animales enfermos, señalaron que se deben apartar en en corrales sanitarios para un rápido tratamiento y control de las posibles enfermedades infecciosas que los afecten.