Se trato de una medida intempestiva y sin previo aviso indicaron desde el Mercado de Cañuelas

Un video tomado por las cámaras de seguridad del mercado ganadero (MAG) muestra a un grupo de sindicalistas, que representarían a los trabajadores de los atracaderos, destruir una tranquera. Con posterioridad a eso, se impidió la descarga de hacienda.

"El consignatario Julián Lalor dijo que "es inadmisible que un sindicato tome una medida de forma intempestiva dañando la infraestructura del mercado. Hace pocos días vino la intendente de Cañuelas, Marisa Fassi, y luego gobernador, Axel Kicillof, pero hoy tenemos un problema y ninguneo se hace presente para resolverlo y ayudarnos".

 Un comunicado del MAG relata los hechos: "Ayer el secretario adjunto del sindicato, Alfredo Pérez, comunicó el cese de actividades por parte de la gente de la descarga. El cese fue de forma intempestiva, sin previo aviso y por ende sin notificación formal".

"Posteriormente gente que NO pertenece al Mercado ingresó derribando la tranquera del ingreso de los camiones y se plegaron al secretario adjunto. Dentro de esos individuos se encontraba Nahuel Ochoa, hijo del secretario general".

Con posteridad a esos hechos, los consignatarios fueron a "conversar sobre el conflicto, pero al ser Nahuel Ochoa (quien no es empleado del mercado ni representante gremial) el que encabezaba la negociación y/o usurpación, se cortaron las comunicaciones ya que dejó en claro que la resolución es a través de la apropiación de la comercialización de los animales caídos".

Las negociaciones siguieron durante la madrugada: "A la 1 AM fuimos a Mataderos a reunirnos con Fabián Ochoa (secretario general). Ingresamos al gremio y comenzó a realizar demandas desmedidas, como por ejemplo bono para todo el personal del mercado, inclusive el de limpieza y gauchos, de $30.000; categoría máxima para todo el personal; desvinculación de Ignacio Solá; tomar en planta permanente personal jornalizado (dicha categoría está avalada por el convenio), etc. Al ver que la negociación pasaba pura y exclusivamente por la comercialización de los animales caídos, procedimos a retirarnos".

 La entrada en el día de hoy fue de tan solo 2.222 vacunos, número que debería haber sido muy superior. La mayor parte de la hacienda permaneció entre 8 y 12 horas en los camiones, hasta que se tomó la decisión de comercializar sin la descarga y la remisión directa a los frigoríficos para evitar más demoras y estrés en los animales.

En las últimas horas hubo cierta descompresión en el conflicto, que permitió dar paso a la descarga de algunos camiones más con hacienda de distintas categorías.