El Criterio publicó su informe de agronegocios
El newsletter de la firma analiza los acontecimientos en torno a la actividad ganadera, la agrícola y la administrativa en los últimos dos meses. Precios estables en ganadería, el clima sigue representando un desafío importante para el agro, expectativas y decisiones gubernamentales que se siguen haciendo esperar.
La empresa azuleña El Criterio Gerenciamiento Agropecuario publicó la edición nro. 14 de su informe bimestral de agronegocios, correspondiente a los meses de agosto y septiembre de 2024, repasando los eventos más relevantes del período para el sector agropecuario.
Esta edición, así como todas las anteriores, están disponibles para lectura online o descarga en PDF ingresando a la web de la firma https://elcriterio.com.ar/informes/informe-de-agronegocios/.
Tres de los integrantes del equipo, Juan Cruz Pérez, Matías Rodríguez (ambos Lic. en Adm Agraria) y el MV Luis Rodríguez Kelly, nos hicieron un resumen de los tres ejes productivos centrales: Ganadería, Agricultura y Administración.
Ganadería:
Estabilidad en los precios y un entorno climático y económico desafiante son las señas particulares del período para el sector pecuario. Según Matías Rodríguez, los meses de agosto y septiembre no presentaron cambios significativos respecto a los anteriores, perdiéndose terreno frente a la inflación. "El volumen de terneros sigue siendo bajo, como es habitual en esta época del año. Sin embargo, la irregularidad de las lluvias está afectando la oferta forrajera, lo que está impidiendo que los precios suban como esperaríamos," explicó.
Luis Rodríguez Kelly, por su parte, destacó un dato positivo: el aumento del 25% en los valores de las vacas para faena, con precios entre 1.300 y 1.500 pesos por kilo, tras la eliminación de derechos de exportación. "Este incremento responde a la menor oferta estacional y a la creciente demanda de China, que probablemente mantenga los precios estables en los próximos meses," apuntó. Sin embargo, el profesional apuntó que el novillo no ha mostrado subas tan notorias, quedándose entre los 2.000 y 2.100 pesos por kilo, lo que genera cierta incertidumbre en el sector.
Un aspecto clave es la presión que ejerce la inflación en todas las categorías del ganado. Juan Cruz Pérez señaló que "el stock de hacienda en feedlots sigue alto, alcanzando 2 millones de cabezas, lo que sugiere que la oferta de carne no disminuirá en el corto plazo." Sin embargo, el consumo interno se mantiene bajo, alrededor de 50 kg por habitante al año, afectado por la competencia de carnes más económicas, como pollo y cerdo.
Finalmente, remarcó que las exportaciones están comenzando a sentir el impacto de los precios internacionales más bajos y el atraso cambiario, ya que aunque la exportación se mantiene activa, la rentabilidad está disminuyendo. Expresó además que Brasil sigue siendo un competidor fuerte, con precios hasta un 30% más bajos.
En este sentido, Rodríguez Kelly sugirió que eliminar por completo los derechos de exportación podría mejorar la competitividad del sector. "Esto no solo estimularía la inversión, sino que podría tener un impacto positivo en la retención de vientres y el volumen exportado," concluyó.
Agricultura:
Según el informe de la empresa,el agro tampoco lo lleva tan fácil, con una marcada incertidumbre climática y moderación en los precios internacionales que repercuten de manera directa en las decisiones de los productores.
Según Juan Cruz Pérez, "aunque los precios internacionales han mostrado un leve repunte gracias a la baja de tasas de la FED y el desarme de posiciones vendidas, la reacción ha sido menor de lo esperado." Sin embargo, las proyecciones de producción mundial, con cosechas récord en Estados Unidos, siguen manteniendo una presión bajista sobre los granos, especialmente en soja y maíz.
Matías Rodíguez, por su parte, señaló que en Argentina los productores están enfrentando un mercado desconectado del internacional debido a las distorsiones cambiarias. "Los precios locales están por encima de los precios de paridad, pero si la brecha cambiaria se reduce, podríamos ver caídas en los precios locales," advirtió. A nivel internacional, el clima en Sudamérica será determinante en los próximos meses, con la esperanza de que las lluvias estabilicen el panorama.
Así como en ganadería, el clima también está generando preocupación entre los productores locales, especialmente en lo que respecta a la siembra de la gruesa. "En algunas zonas, el clima ya está afectando la definición de las fechas de siembra y el desarrollo de los cultivos," comentó Pérez. A pesar de esto, la campaña de fina está mostrando buenos resultados, aunque las expectativas están puestas en cómo evolucionará la situación hídrica para garantizar una buena cosecha.
Finalmente, ambos coincidieron en que la disminución en el área sembrada de maíz, con pronósticos de entre un 10% y un 20% menos, será una realidad para esta campaña, mientras que se espera un aumento en la siembra de soja, girasol y sorgo. "La demanda de insumos sigue retrasada, y muchos productores están esperando hasta último momento para definir sus compras, confiando en que no habrá faltantes como el año pasado," concluyó Rodríguez.
Administración:
Las empresas parecen estar como en un estado de pausa, a la expectativa de mejoras económicas y decisiones gubernamentales postergadas. "Se viven momentos de incertidumbre y tensión, en un compás de espera y a la expectativa de medidas económicas que mejoren los márgenes proyectados", señaló Luis Rodríguez Kelly.
Entre las posibles acciones del gobierno que los productores esperan se mencionan una devaluación, una unificación cambiaria o una nueva edición del dólar soja. Sin embargo, la ausencia de señales claras genera inquietud entre los productores, que se ven obligados a postergar decisiones clave.
Juan Cruz Pérez puntualizó que la planificación para la próxima campaña se complica por la baja en los precios internacionales, lo que afecta la liquidación de los remanentes de granos de la campaña anterior. "Las ventanas biológicas para la siembra se acercan, y muchos productores están vendiendo a cuentagotas para cubrir las necesidades de caja, lo que puede llevar a decisiones forzadas," explicó, subrayando que "la reciente reducción del Impuesto PAIS aún no ha tenido un impacto directo, ya que los altos stocks comerciales siguen retenidos como medida de resguardo ante una posible devaluación".
Matías Rodríguez destacó también que la baja de retenciones en carnes y la exención para la leche fueron medidas bien recibidas, pero no resuelven los problemas inmediatos en el sector de los granos. "El gobierno ha descartado una devaluación significativa, lo que complica aún más la posibilidad de un dólar exportador más competitivo," añadió. La falta de una unificación cambiaria y la buena producción esperada en Estados Unidos refuerzan esta percepción de que un repunte en los precios internacionales no es inminente.
Los profesionales remarcaron que la incertidumbre económica actual no solo afecta a los productores, sino que repercute en las economías regionales y en las industrias dependientes del agro. "Sin acciones concretas, la planificación y las inversiones seguirán en pausa," concluyó Juan Cruz Pérez, alertando sobre los posibles efectos a largo plazo en la cadena productiva y la rentabilidad del sector agropecuario.
“La fina viene muy bien pero para que se concrete en los rindes es clave el monitoreo continuo”
El ingeniero agrónomo Ricardo Silvestro, de la firma Rindes y Cultivos DAS, analiza la campaña de trigo y cebada. Explica cómo los vaivenes de clima afectaron a los cultivos y la importancia de las aplicaciones preventivas para controlar enfermedades
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El Criterio publicó su informe de agronegocios
El newsletter de la firma analiza los acontecimientos en torno a la actividad ganadera, la agrícola y la administrativa en los últimos dos meses. Precios estables en ganadería, el clima sigue representando un desafío importante para el agro, expectativas y decisiones gubernamentales que se siguen haciendo esperar.
La empresa azuleña El Criterio Gerenciamiento Agropecuario publicó la edición nro. 14 de su informe bimestral de agronegocios, correspondiente a los meses de agosto y septiembre de 2024, repasando los eventos más relevantes del período para el sector agropecuario.
Esta edición, así como todas las anteriores, están disponibles para lectura online o descarga en PDF ingresando a la web de la firma https://elcriterio.com.ar/informes/informe-de-agronegocios/.
Tres de los integrantes del equipo, Juan Cruz Pérez, Matías Rodríguez (ambos Lic. en Adm Agraria) y el MV Luis Rodríguez Kelly, nos hicieron un resumen de los tres ejes productivos centrales: Ganadería, Agricultura y Administración.
Ganadería:
Estabilidad en los precios y un entorno climático y económico desafiante son las señas particulares del período para el sector pecuario. Según Matías Rodríguez, los meses de agosto y septiembre no presentaron cambios significativos respecto a los anteriores, perdiéndose terreno frente a la inflación. "El volumen de terneros sigue siendo bajo, como es habitual en esta época del año. Sin embargo, la irregularidad de las lluvias está afectando la oferta forrajera, lo que está impidiendo que los precios suban como esperaríamos," explicó.
Luis Rodríguez Kelly, por su parte, destacó un dato positivo: el aumento del 25% en los valores de las vacas para faena, con precios entre 1.300 y 1.500 pesos por kilo, tras la eliminación de derechos de exportación. "Este incremento responde a la menor oferta estacional y a la creciente demanda de China, que probablemente mantenga los precios estables en los próximos meses," apuntó. Sin embargo, el profesional apuntó que el novillo no ha mostrado subas tan notorias, quedándose entre los 2.000 y 2.100 pesos por kilo, lo que genera cierta incertidumbre en el sector.
Un aspecto clave es la presión que ejerce la inflación en todas las categorías del ganado. Juan Cruz Pérez señaló que "el stock de hacienda en feedlots sigue alto, alcanzando 2 millones de cabezas, lo que sugiere que la oferta de carne no disminuirá en el corto plazo." Sin embargo, el consumo interno se mantiene bajo, alrededor de 50 kg por habitante al año, afectado por la competencia de carnes más económicas, como pollo y cerdo.
Finalmente, remarcó que las exportaciones están comenzando a sentir el impacto de los precios internacionales más bajos y el atraso cambiario, ya que aunque la exportación se mantiene activa, la rentabilidad está disminuyendo. Expresó además que Brasil sigue siendo un competidor fuerte, con precios hasta un 30% más bajos.
En este sentido, Rodríguez Kelly sugirió que eliminar por completo los derechos de exportación podría mejorar la competitividad del sector. "Esto no solo estimularía la inversión, sino que podría tener un impacto positivo en la retención de vientres y el volumen exportado," concluyó.
Agricultura:
Según el informe de la empresa,el agro tampoco lo lleva tan fácil, con una marcada incertidumbre climática y moderación en los precios internacionales que repercuten de manera directa en las decisiones de los productores.
Según Juan Cruz Pérez, "aunque los precios internacionales han mostrado un leve repunte gracias a la baja de tasas de la FED y el desarme de posiciones vendidas, la reacción ha sido menor de lo esperado." Sin embargo, las proyecciones de producción mundial, con cosechas récord en Estados Unidos, siguen manteniendo una presión bajista sobre los granos, especialmente en soja y maíz.
Matías Rodíguez, por su parte, señaló que en Argentina los productores están enfrentando un mercado desconectado del internacional debido a las distorsiones cambiarias. "Los precios locales están por encima de los precios de paridad, pero si la brecha cambiaria se reduce, podríamos ver caídas en los precios locales," advirtió. A nivel internacional, el clima en Sudamérica será determinante en los próximos meses, con la esperanza de que las lluvias estabilicen el panorama.
Así como en ganadería, el clima también está generando preocupación entre los productores locales, especialmente en lo que respecta a la siembra de la gruesa. "En algunas zonas, el clima ya está afectando la definición de las fechas de siembra y el desarrollo de los cultivos," comentó Pérez. A pesar de esto, la campaña de fina está mostrando buenos resultados, aunque las expectativas están puestas en cómo evolucionará la situación hídrica para garantizar una buena cosecha.
Finalmente, ambos coincidieron en que la disminución en el área sembrada de maíz, con pronósticos de entre un 10% y un 20% menos, será una realidad para esta campaña, mientras que se espera un aumento en la siembra de soja, girasol y sorgo. "La demanda de insumos sigue retrasada, y muchos productores están esperando hasta último momento para definir sus compras, confiando en que no habrá faltantes como el año pasado," concluyó Rodríguez.
Administración:
Las empresas parecen estar como en un estado de pausa, a la expectativa de mejoras económicas y decisiones gubernamentales postergadas. "Se viven momentos de incertidumbre y tensión, en un compás de espera y a la expectativa de medidas económicas que mejoren los márgenes proyectados", señaló Luis Rodríguez Kelly.
Entre las posibles acciones del gobierno que los productores esperan se mencionan una devaluación, una unificación cambiaria o una nueva edición del dólar soja. Sin embargo, la ausencia de señales claras genera inquietud entre los productores, que se ven obligados a postergar decisiones clave.
Juan Cruz Pérez puntualizó que la planificación para la próxima campaña se complica por la baja en los precios internacionales, lo que afecta la liquidación de los remanentes de granos de la campaña anterior. "Las ventanas biológicas para la siembra se acercan, y muchos productores están vendiendo a cuentagotas para cubrir las necesidades de caja, lo que puede llevar a decisiones forzadas," explicó, subrayando que "la reciente reducción del Impuesto PAIS aún no ha tenido un impacto directo, ya que los altos stocks comerciales siguen retenidos como medida de resguardo ante una posible devaluación".
Matías Rodríguez destacó también que la baja de retenciones en carnes y la exención para la leche fueron medidas bien recibidas, pero no resuelven los problemas inmediatos en el sector de los granos. "El gobierno ha descartado una devaluación significativa, lo que complica aún más la posibilidad de un dólar exportador más competitivo," añadió. La falta de una unificación cambiaria y la buena producción esperada en Estados Unidos refuerzan esta percepción de que un repunte en los precios internacionales no es inminente.
Los profesionales remarcaron que la incertidumbre económica actual no solo afecta a los productores, sino que repercute en las economías regionales y en las industrias dependientes del agro. "Sin acciones concretas, la planificación y las inversiones seguirán en pausa," concluyó Juan Cruz Pérez, alertando sobre los posibles efectos a largo plazo en la cadena productiva y la rentabilidad del sector agropecuario.
“La fina viene muy bien pero para que se concrete en los rindes es clave el monitoreo continuo”
El ingeniero agrónomo Ricardo Silvestro, de la firma Rindes y Cultivos DAS, analiza la campaña de trigo y cebada. Explica cómo los vaivenes de clima afectaron a los cultivos y la importancia de las aplicaciones preventivas para controlar enfermedades