¿Qué puede esperar el campo del nuevo gobierno?
Mientras los productores esperan señales anticipadas para definir decisiones e inversiones, circulan nombres y un documento con propuestas para el sector
Definida la elección y con la certeza que a partir del 11 de diciembre Alberto Fernández será el nuevo presidente, se perfilan candidatos para estar al frente de la estructura agropecuaria. Aparecen como alternativas más fuertes, la de Gabriel Delgado, ex Secretario de Agricultura, durante el último mandato presidencial de Cristina Fernández de Kirchner y en momentos en que Carlos Casamiquela ocupaba el cargo de ministro. Delgado, durante su gestión, mostró una apertura al diálogo y cuestionó fundamentalmente la política de restricciones comerciales que se aplicó en el pasado a productos como el trigo, el maíz y la carne. Trascendió en aquel momento, que Delgado intentó modificar esa política pero fracasó en el intento. También tuvo una activa participación en el armado del gabinete agropecuario en el caso de que Aníbal Fernández triunfara en las elecciones de 2015 a la gobernación bonaerense, cosa que no sucedió porque fue María Eugenia Vidal la que logró acceder a dicho cargo.
El otro candidato a la cartera agropecuaria, es Jorge Neme. Se trata de un dirigente muy cercano al gobernador de Tucumán, Juan Manzur, a quien acompaña en la gestión como Secretario de Relaciones Internacionales de la provincia, y también formó parte del gobierno kirchnerista como titular del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap).
También ha tenido alguna participación en la campaña de Fernández, cuando hubo que analizar cuestiones agropecuarias, Javier de Urquiza, ex Secretario de Agricultura durante el conflicto por la 125. Hay que recordar que Fernández llamó a De Urquiza, en los momentos previos a su reunión con la Mesa de Enlace, para que leyera y opine sobre el documento de 14 puntos que elaboró la dirigencia del campo.
Documento con propuestas para el campo
Tanto Gabriel Delgado como Jorge Neme tuvieron una altísima participación en la elaboración de un documento que circuló en varios sectores ligados a la producción agroindustrial en agosto pasado con propuestas de políticas a implementar en un futuro gobierno.
Si bien no hubo indicios y certezas sobre el si el mismo contó con el aval de Alberto Fernández, según pudo saber Infobae medio integrantes de la mesa chica del presidente electo habrían adherido a la propuesta y todo indicaría que la política agropecuaria, sea quien sea el titular de la cartera de Agricultura, giraría en torno a este documento que elaboraron Neme y Delgado. En dicho documento se realiza una autocrítica por las políticas del pasado.
A partir de esta oportunidad que ofrece una mayor demanda mundial de alimentos, el documento propone una política para el sector agroindustrial "orientada a aumentar los niveles de producción de todas las cadenas, a partir de diseñar el conjunto de instrumentos e incentivos para alcanzar los niveles de productividad y competitividad necesarios para llegar a los mercados, al interior y al mundo".
A partir de esta oportunidad que ofrece una mayor demanda mundial de alimentos, el documento propone una política para el sector agroindustrial "orientada a aumentar los niveles de producción de todas las cadenas, a partir de diseñar el conjunto de instrumentos e incentivos.
Además se propone un aumento de las exportaciones, "hoy tenemos un desempeño muy pobre en exportaciones de bienes y servicios, poco más del 11% de nuestro PBI cuando la media de los países en vías de desarrollo ronda alrededor del 25 %. Hemos perdido mercados y lo que exportamos son fundamentalmente insumos para cadenas globales en las cuales el valor agregado se realiza en otros destinos", sostiene la propuesta.
También se sostiene que "todas las cadenas productivas del país agroindustrial tendrán asegurada su rentabilidad, su capacidad de crecer y desarrollarse y su posibilidad de exportar. No habrá medida económica que afecte la rentabilidad del sector. Vamos a reconstruir el tejido social, productivo, y el empleo".
Asimismo, se resalta "la importancia de industrializar la ruralidad". Al respecto se propone, "promover la producción de bienes industriales de base agropecuaria y de bienes de capital que esas materias primas obtenidas con alta eficiencia requieren para ser transformadas en alimentos complejos, preparados o semi-preparados, congelados o enfriados, clasificados, embalados y empacados con los más sofisticados procesos y con el mayor valor agregado incorporado en origen".
Financiamiento
El documento también contempla un aspecto vital para el sector que es el financiamiento. Para resolver este problema actual, donde es imposible acceder al crédito por las elevadas tasas de interés, se propone implementar un financiamiento específico, ajustado a las necesidades de los productores y que tenga un rol de promoción, estimulando la innovación y la incorporación de tecnología.
Toda esta propuesta de aumentar la productividad y las exportaciones, con financiamiento acorde a las necesidades de todos los sectores, se da en un contexto de cambios tecnológicos donde la agroindustria cuenta con la fortaleza de su cultura innovadora, expresada en el desarrollo de la siembre directa y los sistemas de acopio en los silos bolsa, en las prácticas agrícolas o en el desarrollo de la biotecnología. Los desafíos de la inteligencia artificial, la robótica, la construcción de redes, las tecnologías de información y satelitales marcaran la agenda del nuevo gobierno, para facilitar un país más moderno, competitivo, dinámico e inclusivo.
Este cambio en el poder de la Argentina significará como lo expresó recientemente la Federación Agraria Argentina, que "finalmente llegó la hora de que pasemos de las promesas a las acciones, y de los diagnósticos a las soluciones".
Fuente: INFOBAE
“La fina viene muy bien pero para que se concrete en los rindes es clave el monitoreo continuo”
El ingeniero agrónomo Ricardo Silvestro, de la firma Rindes y Cultivos DAS, analiza la campaña de trigo y cebada. Explica cómo los vaivenes de clima afectaron a los cultivos y la importancia de las aplicaciones preventivas para controlar enfermedades
ÚLTIMAS NOTICIAS
¿Qué puede esperar el campo del nuevo gobierno?
Mientras los productores esperan señales anticipadas para definir decisiones e inversiones, circulan nombres y un documento con propuestas para el sector
Definida la elección y con la certeza que a partir del 11 de diciembre Alberto Fernández será el nuevo presidente, se perfilan candidatos para estar al frente de la estructura agropecuaria. Aparecen como alternativas más fuertes, la de Gabriel Delgado, ex Secretario de Agricultura, durante el último mandato presidencial de Cristina Fernández de Kirchner y en momentos en que Carlos Casamiquela ocupaba el cargo de ministro. Delgado, durante su gestión, mostró una apertura al diálogo y cuestionó fundamentalmente la política de restricciones comerciales que se aplicó en el pasado a productos como el trigo, el maíz y la carne. Trascendió en aquel momento, que Delgado intentó modificar esa política pero fracasó en el intento. También tuvo una activa participación en el armado del gabinete agropecuario en el caso de que Aníbal Fernández triunfara en las elecciones de 2015 a la gobernación bonaerense, cosa que no sucedió porque fue María Eugenia Vidal la que logró acceder a dicho cargo.
El otro candidato a la cartera agropecuaria, es Jorge Neme. Se trata de un dirigente muy cercano al gobernador de Tucumán, Juan Manzur, a quien acompaña en la gestión como Secretario de Relaciones Internacionales de la provincia, y también formó parte del gobierno kirchnerista como titular del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap).
También ha tenido alguna participación en la campaña de Fernández, cuando hubo que analizar cuestiones agropecuarias, Javier de Urquiza, ex Secretario de Agricultura durante el conflicto por la 125. Hay que recordar que Fernández llamó a De Urquiza, en los momentos previos a su reunión con la Mesa de Enlace, para que leyera y opine sobre el documento de 14 puntos que elaboró la dirigencia del campo.
Documento con propuestas para el campo
Tanto Gabriel Delgado como Jorge Neme tuvieron una altísima participación en la elaboración de un documento que circuló en varios sectores ligados a la producción agroindustrial en agosto pasado con propuestas de políticas a implementar en un futuro gobierno.
Si bien no hubo indicios y certezas sobre el si el mismo contó con el aval de Alberto Fernández, según pudo saber Infobae medio integrantes de la mesa chica del presidente electo habrían adherido a la propuesta y todo indicaría que la política agropecuaria, sea quien sea el titular de la cartera de Agricultura, giraría en torno a este documento que elaboraron Neme y Delgado. En dicho documento se realiza una autocrítica por las políticas del pasado.
A partir de esta oportunidad que ofrece una mayor demanda mundial de alimentos, el documento propone una política para el sector agroindustrial "orientada a aumentar los niveles de producción de todas las cadenas, a partir de diseñar el conjunto de instrumentos e incentivos para alcanzar los niveles de productividad y competitividad necesarios para llegar a los mercados, al interior y al mundo".
A partir de esta oportunidad que ofrece una mayor demanda mundial de alimentos, el documento propone una política para el sector agroindustrial "orientada a aumentar los niveles de producción de todas las cadenas, a partir de diseñar el conjunto de instrumentos e incentivos.
Además se propone un aumento de las exportaciones, "hoy tenemos un desempeño muy pobre en exportaciones de bienes y servicios, poco más del 11% de nuestro PBI cuando la media de los países en vías de desarrollo ronda alrededor del 25 %. Hemos perdido mercados y lo que exportamos son fundamentalmente insumos para cadenas globales en las cuales el valor agregado se realiza en otros destinos", sostiene la propuesta.
También se sostiene que "todas las cadenas productivas del país agroindustrial tendrán asegurada su rentabilidad, su capacidad de crecer y desarrollarse y su posibilidad de exportar. No habrá medida económica que afecte la rentabilidad del sector. Vamos a reconstruir el tejido social, productivo, y el empleo".
Asimismo, se resalta "la importancia de industrializar la ruralidad". Al respecto se propone, "promover la producción de bienes industriales de base agropecuaria y de bienes de capital que esas materias primas obtenidas con alta eficiencia requieren para ser transformadas en alimentos complejos, preparados o semi-preparados, congelados o enfriados, clasificados, embalados y empacados con los más sofisticados procesos y con el mayor valor agregado incorporado en origen".
Financiamiento
El documento también contempla un aspecto vital para el sector que es el financiamiento. Para resolver este problema actual, donde es imposible acceder al crédito por las elevadas tasas de interés, se propone implementar un financiamiento específico, ajustado a las necesidades de los productores y que tenga un rol de promoción, estimulando la innovación y la incorporación de tecnología.
Toda esta propuesta de aumentar la productividad y las exportaciones, con financiamiento acorde a las necesidades de todos los sectores, se da en un contexto de cambios tecnológicos donde la agroindustria cuenta con la fortaleza de su cultura innovadora, expresada en el desarrollo de la siembre directa y los sistemas de acopio en los silos bolsa, en las prácticas agrícolas o en el desarrollo de la biotecnología. Los desafíos de la inteligencia artificial, la robótica, la construcción de redes, las tecnologías de información y satelitales marcaran la agenda del nuevo gobierno, para facilitar un país más moderno, competitivo, dinámico e inclusivo.
Este cambio en el poder de la Argentina significará como lo expresó recientemente la Federación Agraria Argentina, que "finalmente llegó la hora de que pasemos de las promesas a las acciones, y de los diagnósticos a las soluciones".
Fuente: INFOBAE
“La fina viene muy bien pero para que se concrete en los rindes es clave el monitoreo continuo”
El ingeniero agrónomo Ricardo Silvestro, de la firma Rindes y Cultivos DAS, analiza la campaña de trigo y cebada. Explica cómo los vaivenes de clima afectaron a los cultivos y la importancia de las aplicaciones preventivas para controlar enfermedades