Un profesional de la zona de 16 de Julio y  algunos productores dan su perspectiva de una situación complicada, con más aristas de las que se perciben a simple vista

Los grupos de Whatsapp de ZonaCampo pusieron de manifiesto en los últimos días que la proliferación de jabalíes en la zona es una realidad. Muchos avistajes, incluso en grupos de más de 30 ejemplares, algunos reportes de daños y muchas fotografías de animales cazados.  En el día de ayer, uno de los usuarios compartió un video, realmente impactante, que nos permitimos retomar y publicar. 

En esta, la segunda nota que dedicamos a la temática, presentamos el punto de vista de un veterinario de 16 de Julio, que según nuestro relevamiento es una de las zonas más complicadas del partido, y algunos productores que prefirieron mantenerse en reserva, debido a ciertos aspectos no tan visibles de la problemática. En la edición del domingo terminaremos de presentar nuestro informe, con una entrevista exclusiva al equipo profesional de Veterinaria Romero.

Bernardo Bruno Servat, veterinario de esa localidad nos manifestó que "si bien existían reportes de avistajes de jabalies en estado salvaje en la zona, eran esporádicos y se localizaban en campos de la zona de Martín Fierro. Hacia 2017 fueron más frecuentes los hallazgos, extendiéndose hacia ruta 226 al norte y ruta 3 al oeste. Este año hubo un accidente grave en ruta 226 km 225 por atropellamiento de un ejemplar. Hacia 2018 se empiezan a detectar al oeste de ruta 3 a la altura del Enlace. Actualmente se han visto en las cercanías del pueblo, a unos 5 km.".

Servat, por su profesión, posee un conocimiento que va más allá de la descripción de este nuevo fenómeno y analiza las causas que llevaron a la proliferación de jabalíes en nuestro partido. "En lugares tranquilos se arriman a los chiqueros, suelen pelear con los padrillos de cerdos domésticos, causándoles importantes lesiones, para cruzarse con las cerdas. Por ser muy prolíferos, carecer de enemigos naturales, ser muy agresivos y a la vez muy escurridizos han aumentado considerablemente en número. Se refugian y alimentan en los maizales y es muy dificil cazarlos con armas de bajo calibre, siendo necesario el uso de fusiles para derribarlos. La misma caza y persecución hace que los grupos familiares o piaras se disgreguen, se separan en la huida, y vuelven a formar nuevos grupos que comienzan a reproducirse. Esto facilitado por la gran cantidad de lotes de maíz en excelente estado hubo este año. Con la cosecha de esos lotes salen "como chancho de los maizales" y se siguen dispersando. Lo más preocupante de este fenómeno es que pueden transmitir infecciones como la peste porcina o leptospirosis y propagar la triquinosis al hombre" concluye el profesional

Otros vecinos de la zona manifestaron a este medio que la mayor cantidad de jabalíes son avistados en los campos más quebrados. Tanto en los bajos como en los cerros, donde no se realiza labranza. su hábitat preferido son los pajonales que ahí proliferan. Desde esos campos quebrados se desplazan hasta los cultivos de maíz y de soja para regresar a las madrigueras.

Algunos aspectos no tan visibles de la problemática vienen la mano de dos cuestiones: por un lado, la cría o utilización para cruza  por parte de los productores de cerdos, para logar carnes más magras, que termina saliéndose de control. y genera más problemas que soluciones. A modo de ejemplo, según nos indicó el veterinario Carlos Romero en la entrevista que publicaremos el domingo, la foto de la izquierda es de un padrillo cruza con cerdo común, ya que los cuartos traseros de los jabalíes puros son mucho más pequeños, tienen un tipo de cuerpo "triangular", con mucho porte delantero pero caderas pequeñas.

Por otro lado, la caza clandestina, o no autorizada por los dueños de los campos. Si bien las piaras generan problemas importantes en cuanto daño a la propiedad, los cultivos y el riesgo a las personas, las incursiones no autorizadas de cazadores a veces generan problemas mayores, por lo cual lamentablemente muchos productores prefieren convivir con el flagelo de los cerdos antes que con los daños ocasionados por seres humanos.

A nivel provincial

La aparición de lo que consideran un importante número de animales que no son autóctonos de la región y que se han expandido en su territorio es foco de atención en Olavarría y también en otros partidos.

Es así que ya el Ministerio de Agroindustria habilitó la caza en Carmen de Patagones, Mar Chiquita y Tapalqué, al considerarse al jabalí una especie exótica invasora que ocasiona prejuicios a la producción agropecuaria. Los cerdos silvestres no son originarios del continente americano sino descendientes de los primeros cerdos domésticos introducidos con fines cinegéticos por los conquistadores españole. Esta especie, que lleva más de cinco siglos de adaptación en la provincia de Buenos Aires, encontró un buen hábitat donde no tiene predador.

Mientras tanto en Azul desde el mismo Ministerio respondieron a la petición realizada por el Concejo Deliberante para que se habilite al partido en ese sentido, es decir que se lo elimine por medio de la caza habilitada.

Corriéndonos un poco a la provincia de La Pampa, desde donde se supone proviene el problema y se viene trasladando a Buenos Aires, se han detectado casos de triquinosis en jabalíes, dando cuenta de la importancia que tiene realizar los análisis bromatológicos de rigor cuando se utiliza su carne para facturas caseras. A través de este link se puede acceder a una nota del portal pampeano ruralaldia.com referida a esta cuestión.

Por En Línea Noticias y ZonaCampo