Organizados por un productor del país vecino, pasaron dos días tomando contacto con el trabajo de Tiburcio Imaz  

Miguel Viñuales (ZonaCampo) 

Tiburcio Imaz todavía no cae en la cuenta, y en cierto sentido, parece que lo tiene sin cuidado, ya que lo que realmente le interesa es dedicarse a fondo a lo que le apasiona: la ganadería bajo pastoreo racional intensivo. Pero lo cierto es que, queriéndolo o no, se ha ido transformando en un referente nacional e internacional en el tema, recibiendo permanentemente visitas de productores y técnicos que vienen a ver de qué se trata, y cómo hace para producir diez veces más que el promedio de la zona.

"Hace unos meses, nos llamaban y decíamos que vengan cuando quieran, que nosotros estábamos siempre. Ahora, cuando llaman los saludo y les paso con mi esposa, que es la que lleva la agenda, para ver cuándo les podemos dar un turno", dice con una mezcla de sorpresa y entusiasmo el productor de General Lamadrid, recién llegado de disertar en un encuentro forrajero en Pergamino, y que estima en 300 las personas que han pasado el último año para capacitarse en su establecimiento.

Entre estas visitas, el fin de semana pasado se acercaron a La Posta un grupo de 23 productores, la mayoría de nacionalidad uruguaya, aunque también había algunos argentinos con campo en el litoral y un productor brasileño.

El contingente, perteneciente a la Red Uruguaya de Pastoreo Racional, que nuclea unos 200 productores y técnicos muy involucrados en el sistema productivo, fue organizado y coordinado por el productor Leovigildo Da Silva, referente en el país vecino. Uruguay cuenta con una movida muy fuerte de ganadería pastoril intensiva, generalmente llevada a cabo por productores pequeños, arraigados en el campo.

"Yo tengo dos establecimientos, uno en Durazno, donde realizo un esquema de cría de manera tradicional, y en el otro, en el departamento de Río Negro, tengo un sistema de pastoreo racional intensivo, muy parecido en funcionamiento y resultados a lo que hace acá Tiburcio, donde llevo los terneros machos de destete de cada año, y los vendo con peso cuota, entre 350 y 380 kilos", expresó Da Silva.

"Yo conocí a Tiburcio a través de internet, lo sigo en las redes, ya desde hace un año que tenía el proyecto de conocer in situ lo que se hace en La Posta. La verdad es que estoy muy impresionado, me ha impactado especialmente la dedicación que le pone", concluyó.

La mitad del grupo se alojó en el lugar, y el resto en un hospedaje en el pueblo, y compartieron con la familia Imaz dos jornadas a pleno Pastoreo Racional Intensivo, para luego partir rumbo a la provincia de Córdoba, a visitar otro establecimiento donde también se trabaja en un esquema de intensificación pastoril.

En los próximos días, no te pierdas el especial de ZonaCampoTV con los momentos más destacados de la visita.